L D (Agencias) Según la delegación del Gobierno en Navarra, el viernes por la tarde recibió una propuesta de manifestación por la vía de urgencia para protestar por las detenciones de miembros de la dirección de Batasuna-ETA del pasado jueves por la noche.
La institución que dirige el socialista Vicente Ripa no la autorizó al no aceptar los argumentos esgrimidos para justificar la urgencia. Por ello, efectivos de la Unidad de Intervención del Cuerpo Nacional de Policía se personaron esta tarde en la estación de autobuses de la ciudad, donde estaba previsto el inicio de la marcha, "para velar por el cumplimiento" de la resolución.
La Delegación señaló que un grupo comenzó a proferir gritos y a lanzar objetos cuando los agentes comunicaron que la marcha estaba prohibida y, ante la persistencia de la actitud, emplearon material antidisturbios. Un grupo de personas "buscó refugio" en el Casco Antiguo y de camino volcó varios contenedores de basuras.
Fuentes de la Delegación informaron de que varias personas han resultado heridas y al menos una ha tenido que ser trasladada a un centro hospitalario tras la carga policial. Los incidentes en los que se produjeron estos heridos tuvieron lugar hacia las 17,30 horas en las proximidades de la estación de autobuses, donde la policía hizo uso del material antidisturbios para disolver el acto que no estaba autorizado.
Posteriormente los incidentes se trasladaron al casco antiguo de la capital navarra, donde según dichas fuentes se ha producido otra carga policial como consecuencia "del lanzamiento de algún objeto contundente" contra la fachada de la Casa Consistorial.
Posteriormente los incidentes se trasladaron al casco antiguo de la capital navarra, donde según dichas fuentes se ha producido otra carga policial como consecuencia "del lanzamiento de algún objeto contundente" contra la fachada de la Casa Consistorial.
Más marchas en el País Vasco
La manifestación de Pamplona ha sido repetida, después, en las capitales vascas. En Bilbao, cerca de 3.000 personas tomaron parte en la marcha que se desarrolló tras una pancarta en la que se leía "Abrir las puertas a la independencia. ¡Viva Euskal Herria libre!", portada, entre otros, por Marije Fullaondo, integrante de la Mesa Nacional de Batasuna que sigue en libertad.
La manifestación partió pasadas las seis de la tarde del Sagrado Corazón y discurrió por la Gran Vía de la ciudad entre gritos en demanda de la excarcelación de los detenidos, en apoyo a Batasuna-ETA y en favor de la independencia.
"La lucha es el único camino", "El pueblo no perdonará" y "PNV español" fueron otras consignas que se escucharon durante la marcha, que concluyó cerca de una hora más tarde ante el Palacio de Justicia, que se encontraba custodiado por efectivos antidisturbios de la Ertzaintza. A su término, un manifestante dio lectura a la misma declaración difundida horas antes por el dirigente de Batasuna Pernando Barrena, en la que se considera que la operación policial constituye "una declaración de guerra en toda regla" del Gobierno español.
En San Sebastián, varios miles de personas se manifestaron tras una pancarta con el lema en euskera "Marco democrático para Euskal Herria. No a la Constitución. No a la represión. Abrir la puerta a la independencia. Viva Euskal Herria Libre", que portaban, entre otros, los dirigentes de Batasuna Karmele Aierbe, Iñigo Balda y Eusebio Lasa, y la representante del sindicato LAB Ainhoa Lasa.
En las primeras filas de la marcha, se encontraban además otros destacados miembros del entramado etarra, como el secretario general de LAB, Rafa Díez, el ex dirigente de ETA Eugenio Etxebeste "Antxon" y el miembro la dirección de la antigua Herri Batasuna, José María Olarra. Tres furgonetas de la Ertzaintza precedían la manifestación, que partió pasadas las 17:30 horas del Boulevard donostiarra y que también fue controlada desde el aire por un helicóptero de la policía vasca.
La manifestación partió pasadas las seis de la tarde del Sagrado Corazón y discurrió por la Gran Vía de la ciudad entre gritos en demanda de la excarcelación de los detenidos, en apoyo a Batasuna-ETA y en favor de la independencia.
"La lucha es el único camino", "El pueblo no perdonará" y "PNV español" fueron otras consignas que se escucharon durante la marcha, que concluyó cerca de una hora más tarde ante el Palacio de Justicia, que se encontraba custodiado por efectivos antidisturbios de la Ertzaintza. A su término, un manifestante dio lectura a la misma declaración difundida horas antes por el dirigente de Batasuna Pernando Barrena, en la que se considera que la operación policial constituye "una declaración de guerra en toda regla" del Gobierno español.
En San Sebastián, varios miles de personas se manifestaron tras una pancarta con el lema en euskera "Marco democrático para Euskal Herria. No a la Constitución. No a la represión. Abrir la puerta a la independencia. Viva Euskal Herria Libre", que portaban, entre otros, los dirigentes de Batasuna Karmele Aierbe, Iñigo Balda y Eusebio Lasa, y la representante del sindicato LAB Ainhoa Lasa.
En las primeras filas de la marcha, se encontraban además otros destacados miembros del entramado etarra, como el secretario general de LAB, Rafa Díez, el ex dirigente de ETA Eugenio Etxebeste "Antxon" y el miembro la dirección de la antigua Herri Batasuna, José María Olarra. Tres furgonetas de la Ertzaintza precedían la manifestación, que partió pasadas las 17:30 horas del Boulevard donostiarra y que también fue controlada desde el aire por un helicóptero de la policía vasca.
"Aunque traiga tanques no nos someteremos"
Al finalizar la marcha, Olarra animó a los congregados a "mantener la cabeza fría" y a "no caer en la noria de la represión", así como a "arrimar todos el hombro" a pesar de que "vendrán tiempos duros". Al PSOE le advirtió de que "aunque traiga tanques no nos someteremos" porque "no hay cárcel que valga hasta que no liberemos a este pueblo", y al PNV le llamó "esclavo" de los socialistas.
En Vitoria, alrededor de 1.500 personas se manifestaron al grito de "Batasuna aurrera" o "Indepentzia". Entre los asistentes, se encontraba Iñaki Olalde, miembro de la Mesa Nacional, que portaba la pancarta junto a otros dirigentes de la izquierda abertzale de Álava como Pablo Gorostiaga o Amparo Lasheras. Los asistentes corearon consignas en contra del PSOE y del PNV, a quienes tacharon de "fascista" y de "español", respectivamente. La manifestación transcurrió sin incidentes y custodiada por la Ertzaintza y la Policía Local