L D (Agencias) Los investigadores llegaron a este conclusión después de examinar el material encontrado en los registros y de comprobar que el taller de la casa era el mismo que aparecía en un vídeo formativo distribuido por ETA a los integrantes de sus comandos.
Entre los efectos intervenidos hasta el momento figuran, por ejemplo, réplicas en PVC de granadas y de artefactos explosivos para que los etarras aprendieran a montarlos y muestras de distintas sustancias para que se familiarizaran con sus distintos tipos y características.
Según las mismas fuentes, también se han encontrado réplicas de armas, archivos digitales gráficos con instrucciones para el manejo de éstas y de los explosivos, discos compactos destinados a la formación y el adiestramiento de los terroristas y documentación. Los investigadores, que creen asimismo que Cahors era donde se confeccionaba buena parte de la propaganda de la banda, tratan ahora de determinar si algún terrorista pasó por la vivienda para completar su formación, aunque este extremo no está aún acreditado.
Las Fuerzas de Seguridad investigan ahora la relación de Iruretagoyena, que se encargaba de montar los artefactos, con los dos etarras detenidos el pasado 11 de julio en la localidad francesa de Angulema, José Juan García González e Iker Mendizabal Cubas, quienes presuntamente "experimentaban" con distintas sustancias en busca de explosivos más potentes.
Asimismo, la Policía ha encontrado diversos ordenadores, material informático y documentación interna sobre la seguridad interna de la banda terrorista ETA. Todo el material descubierto pone de manifestó que el grupo terrorista desmantelado, además de montar coches-bombas o preparar artefactos explosivos, también se ocupaba de aspectos de propaganda o formación.
Los cuatro etarras detenidos –Luis Ignacio Iruretagoyena Lanz "Suni", Alaitz Aramendi Jaunarena, Oihan Barandalla Goñi y Ander Múgica Andonegui– aún se encontraban en la mañana de este lunes en la comisaría de Cahors, a la espera de ser trasladados en las próximas horas a París, donde prestarán declaración ante la juez antiterrorista Laurence Le Vert.