L D (EFE) Las denominaciones de “Girona” y “Lleida” las aprobó, por unanimidad, la Comisión de Administraciones Públicas del Congreso hace trece años.
La proposición no de ley de CiU establecía que ambas provincias pasarían a llamarse así definitivamente en los documentos oficiales, aunque en libros de texto, material didáctico y otros usos no oficiales el nombre castellano seguiría siendo igualmente válido.