Calentando motores ante la gran concentración que se prevé se lleve a cabo el próximo día 16 a las 16:00 horas ente el Parlamento de Andalucía, justo en el momento en que en sesión parlamentaria dentro del mismo se apruebe la Ley de reordenación del Sector Público Andaluz que el PSOE pactó a solas con UGT y CC.OO, varios cientos de empleados públicos de la Junta de Andalucía se concentraban sobre las 11:00 horas ante el Palacio de Congresos de Sevilla, lugar donde se celebraba la Convención Municipal del PSOE, para abuchear a los cargos presentes del PSOE, del gobierno de la nación, de la Junta de Andalucía y a los elegidos para representar al PSOE en las próximas elecciones municipales.
Añadir que junto a ellos se manifestaron – como en el abucheo a Chaves en la Plaza de España – un grupo de trabajadores de Tussam, la empresa pública de transportes de Sevilla.
Los funcionarios y laborales de la Administración general de la Junta de Andalucía, no desaprovecharon la oportunidad de recordarles a los cargos públicos del PSOE su rotunda oposición al conocido "decretazo del enchufismo".
También tenemos que recordar que este sábado estaban convocadas manifestaciones en todas las capitales andaluzas, excepto Sevilla, que quedaba a la espera del día 16. Dichas manifestaciones fueron tan numerosas como en otras ocasiones y dejan claro al PSOE-A que la movilización de los empleados públicos no ha disminuido un ápice en el rechazo a los Decretos-Ley 5 y 6/2010, así como a su tramitación por Ley en el Parlamento.
El movimiento está sumando apoyos en todos los sectores del sindicalismo independiente, plataformas y asociaciones, así como personas que a título personal se suman al rechazo, como ocurrió ayer en Córdoba, en el que el veterano político andaluz Julio Anguita marchó con los empleados públicos en apoyo a sus legítimas demandas.
La concentración de este domingo en Sevilla empezó ante el edificio Congreso ya que la policía no dejaba que cruzaran la calle y se manifestaran ente la valla del Palacio de Congresos, tal y como ha ocurrido en otras concentraciones. Aún así los gritos y pitos se hacían escuchar varias manzanas a la redonda e incluso traspasaban al interior de los pasillos donde se celebraba la Convención, según manifestaron testigos directos.
Los momentos de mayor tensión se vivieron cuando los concentrados intentaron cruzar la avenida del alcalde Luis Uruñuela y apostarse ante los muros y la valla del Palacio de Congresos. En esos momentos la policía actuó con contundencia, y aunque durante unos minutos los empleados públicos llegaron a la carrera a tomar el muro, lograron rechazarlos y situarlos en la mediana de la Avenida. Los intentos de cortar el tráfico fueron reprimidos sin contemplaciones.
Testigos nos indicaron que la policía se había llevado a alguno de los manifestantes y les había tomado nota de identificación, lo que viene siendo habitual ya en las concentraciones de los empleados públicos en Andalucía como medida de presión, como ocurrió en Málaga, donde el Delegado del Gobierno impuso una multa de 300 euros por manifestarse sin estar autorizado.