L D (Europa Press) El Consejo Político Federal de Izquierda Unida (IU) aprobó esta tarde, con un apoyo del 57 por ciento, que los afiliados –alrededor de 55.000– elijan el candidato de la organización para las elecciones generales mediante el procedimiento de voto por correo. Podrán elegir entre el candidato de la Presidencia y actual coordinador general, Gaspar Llamazares, y la líder del Partido Comunista del País Valenciano (PCPV), Marga Sanz, apoyada por el PCE y sectores críticos con la actual Dirección.
Sanz confirmó su candidatura al presentar hoy 85 avales del Consejo (que cuenta con 247 miembros), 25 más de los 60 exigidos estatutariamente. El método de elección de los candidatos fue aprobado por 91 votos a favor, 58 en contra y 10 abstenciones.
Una vez confirmado el procedimiento, ahora se abre el plazo para la elaboración del censo electoral, que cuenta con una cifra de partida de 55.000 afiliados, y que tendrá que ser confirmada y concretada por las distintas federaciones. Una Comisión de Censos, integrada por dos representantes de la Federal y tres de cada candidatura se encargará de certificar que todo se hace de modo correcto y ajustado a los estatutos de la organización. Los afiliados recibirán en sus domicilios una carta en la que plasmarán su elección y después devolverán a la dirección remitente.
Una consulta no vinculante
No hay fechas para las distintas etapas –confirmación de censos y envío de las cartas– pero fuentes de la Dirección de IU explicaron que esperan contar con un resultado para el 6 o el 7 de noviembre. Además, aclararon que ese resultado de la consulta no es vinculante, puesto que, según los estatutos de IU, corresponde al Consejo Político nombrar al candidato. Este Consejo se convocará a mediados de noviembre, y en él se confirmará oficialmente quien será el candidato de la organización a las elecciones generales.
Tras seis horas de reunión, finalmente fueron 58 intervenciones las que tuvieron lugar en el cónclave de este sábado, entre las que hubo apoyos a ambos candidatos. Así, por ejemplo, el líder de Ezker Batua (EB), Javier Madrazo, apoyó en su intervención a Llamazares, de quien dijo que es un "referente social, con gran capacidad de trabajo, es un candidato sólido que está en la política real y concreta, que conecta muy bien con la izquierda roja, verde y violeta, defiende con valentía y coherencia un modelo de Estado federal y republicano".
Críticas a Llamazares
Por su parte, el presidente ejecutivo del PCE, Felipe Alcaraz, insistió en su apoyo a Sanz, y en que el método de elección del candidato "no puede ser por correo", al tiempo que alertó de que a IU le está "comiendo el bipartidismo". Llegó incluso a criticar el método del voto por correo comparándolo con la polémica que vivió hace unos meses el Real Madrid con la elección de su presidente, y que acabó en los tribunales.
Habló de procedimiento "ilegal" y dijo que ya vería mañana lo que haría a este respecto –dejando en el aire un posible recurso–. Además, aprovechó para subrayar que es "vergonzoso" que al PCE," que es el que ha puesto los muertos, no se le haya consultado para acordar la Ley de Memoria".
El secretario general del PCE, Francisco Frutos, lamentó el "lenguaje" usado en algunas intervenciones del debate y preguntó a los asistentes si no creen que IU es "excesivamente innovadora" por plantear la votación por correo. "¿No creeis que hacia fuera esto va a tener una lectura negativa por reclamar la atención del militante con una carta de ida y vuelta? ¿No sería mejor un debate político y una votación en una urna?", planteó.
A su juicio, si ésta es la primera vez que IU va a plantear una consulta a los afiliados para elegir a un candidato, tal vez sea porque en anteriores ocasiones "estaba más claro". Añadió, además, una serie de críticas a la labor de Llamazares, e ironizó al hablar de una labor de oposición "intransigente y exigente". Por todo ello, reclamó un programa político claro, métodos participativos y democráticos, dirección colectiva y un proyecto federal unitario e integrador, e incluso llegó a hablar de 'llamazarismo' y 'post llamazarismo'.
En su intervención final, Llamazares insistió en que IU es una organización "madura, que aborda esta nueva etapa de forma muy participativa, dando una lección de participación al conjunto de las organizaciones política". Reiteró su "respeto" a la otra candidatura, su "lealtad para con el resultado final" y su "confianza" en el método y en la participación del conjunto de IU. "No tengo duda de que la organización decidirá lo mejor para las próximas elecciones generales", aseveró.
El Consejo aprobó también la resolución política en la que se desarrolla la estrategia preelectoral de cara a los próximos comicios generales, se hace un pormenorizado análisis de la situación política y económica actual, incluida la consecuencia que esto tendrá en la votación de los Presupuestos Generales del Estado, además de analizarse cómo reforzar el papel "alternativo y transformador" de IU de cara a la sociedad. El informe político contó con 88 votos a favor, 52 en contra y 19 abstenciones.