L D (Agencias) Patxi López supera este domingo todo lo dicho hasta ahora sobre la creación del nuevo partido impulsado por Basta Ya que encabeza la hasta hace sólo unas semanas eurodiputada socialista vasca Rosa Díez.
En la entrevista que publica este domingo el diario nacionalista Deia, López arremete contra Díez y UPD. Dice que, al igual que el PP, lleva "las cosas al extremo". Pero no se queda ahí y añade que "cabría decir" que el nuevo partido "es anticonstitucional porque ni siquiera reconoce la diversidad de la España plural o las singularidades que puedan tener el País Vasco, Cataluña y Galicia".
Deja claro que quienes, como Rosa Díez y el PP, se juegan el pellejo en el País Vasco defendiendo la libertad no son santos de su devoción. En cambio, no le llegan los elogios para el líder nacionalista Josu Jon Imaz. Aunque rechaza la evidente cercanía entre las tesis de Imaz y las del socialismo vasco desde la defenestración de Nicolás Redondo, ensalza su figura por aproximarse "a lo que demanda la sociedad vasca".
Reconoce López haber sentido "tristeza" al conocer la renuncia de Imaz al frente del PNV, ya que, según recordó, "hemos compartido muchas cosas" y agradece sobre todo "su apuesta en favor de la paz" y "la manera de entender este país desde la diversidad y la pluralidad". Además, López valora "el esfuerzo" que hizo Imaz al frente del PNV "para buscar una cuerdo entre diferentes y lograr un país de todos y para todos".
Los ciudadanos vascos "han demandado en las urnas el entendimiento entre todos", "quieren un proyecto de país compartido" y rechazan "que una parte de la sociedad pretenda imponerse a la otra", y en esa convicción coincidían Imaz y el PSE-EE, opina el líder de los socialistas vascos. Dice López que en el seno del PNV los discursos "son radicalmente diferentes": "uno para definir un país de entendimiento, como quiere Josu Jon Imaz, y otro más cercano al abertzalismo radical, para llevar al país camino de la independencia marginando y excluyendo a los no nacionalistas".
Reconoce López haber sentido "tristeza" al conocer la renuncia de Imaz al frente del PNV, ya que, según recordó, "hemos compartido muchas cosas" y agradece sobre todo "su apuesta en favor de la paz" y "la manera de entender este país desde la diversidad y la pluralidad". Además, López valora "el esfuerzo" que hizo Imaz al frente del PNV "para buscar una cuerdo entre diferentes y lograr un país de todos y para todos".
Los ciudadanos vascos "han demandado en las urnas el entendimiento entre todos", "quieren un proyecto de país compartido" y rechazan "que una parte de la sociedad pretenda imponerse a la otra", y en esa convicción coincidían Imaz y el PSE-EE, opina el líder de los socialistas vascos. Dice López que en el seno del PNV los discursos "son radicalmente diferentes": "uno para definir un país de entendimiento, como quiere Josu Jon Imaz, y otro más cercano al abertzalismo radical, para llevar al país camino de la independencia marginando y excluyendo a los no nacionalistas".
Aboga por un "un pacto entre vascos" para incrementar el "autogobierno"
Horas después, tras asistir al pregón de la Fiesta de la vendimia, que hoy se celebra en la localidad alavesa de Leza, López asumía como propio el discurso de Imaz.
Compareció ante los medios para apostar, "como hace Josu Jon Imaz", por "la necesidad de lograr un pacto entre vascos", para mejorar el autogobierno y "que respete la pluralidad y la diversidad intrínseca de la sociedad vasca". En este sentido, dijo que dicho pacto se debe "canalizar por las normas que nos hemos marcado entre todos" y que debe aprobarse por el Parlamento vasco y por las Cortes Generales para que después "Lo refrende la sociedad vasca".
"Pero en ausencia de violencia, porque la prioridad en estos momentos es acabar con quien impide que todos hagamos política en igualdad de condiciones", precisó, antes de indicar que este pacto estaría frente a la "consulta sin ningún tipo de legalidad ni legitimidad" que propone Ibarretxe, y serviría para mejorar el autogobierno, sobre todo, porque "reforzaría la convivencia respetando la identidad, las ideas y los sentimientos".
Además, según dijo, serviría para "definir el país y el futuro de Euskadi", ya que acabaría en un referéndum "que se merece y necesita la sociedad vasca". "Un referéndum que sirva para suscribir acuerdos, no para dividir o enfrentar", apuntó.