Colabora

La Policía gala cifra en 900.000 euros anuales la recaudación de ETA por la extorsión

 

L D (Agencias) El oficial de la Subdirección Antiterrorista (SDAT) francesa, Stéphane Durey, cifró este martes en unos 900.000 euros los ingresos anuales de ETA, procedentes en un 90 o 95 por ciento de la extorsión a empresarios y profesionales liberales.
 
Durey basó estas cifras en el análisis de la documentación contable hallada en Salis-de-Béarn, la localidad del sur de Francia donde fue detenida en octubre de 2004 Soledad Iparaguirre Amboto, responsable de la tesorería de ETA, la estructura encargada de la gestión de fondos, de enviar las cartas a los objetivos del impuesto revolucionario y de recoger el dinero. El agente galo compareció hoy como testigo en el juicio abierto en París contra la red de extorsión de ETA.
  
El agente explicó, igualmente, que entre 2003 y 2004 las autoridades españolas advirtieron de una intensificación de las campañas de extorsión de ETA, un hecho corroborado por las notas internas de la banda en las que se habla de la necesidad de multiplicar los grupos de extorsión ('Gezi').
  
Esta hipótesis fue igualmente avalada por las 144 cartas de extorsión halladas en un coche en el que viajaban miembros de ETA en la región francesa de Las Landas en 2003. El policía francés especificó que el decomiso de estas misivas permitió dividirlas en tres categorías. Una primera carta en la que la banda solicita una "ayuda" y cuya cantidad suele oscilar entre los 15.000 y los 200.000 euros.
  
Una segunda misiva "de recuerdo" en la que se da un mes de plazo para pagar si no quiere convertirse en objetivo potencial de ETA, y una última de "amenaza", en la que se considera a la víctima como "objetivo" al haberse negado a pagar el importe solicitado. Además, mencionó dos casos de extorsión en territorio francés, un empresario de San Juan de Luz y un futbolista profesional galo –en alusión a Vicente Lizarazu–.
 
2,5 millones de 2004.
  
La banda terrorista ETA contaba en el año 2004 con un presupuesto global de 2,5 millones de euros para financiar las actividades terroristas y el mantenimiento de toda su estructura, según desveló hoy el también oficial de la Subdirección Antiterrorista francesa (SDAT) Jérôme Broglio,
  
El Tribunal especial de lo Criminal de París inició ayer el proceso contra Ane Miren Alberdi Zubirrementeria, Cristina Goirizelaia González y Carlos Sáez de Egilaz, acusados de pertenecer a la red de extorsión de la banda terrorista. Los tres fueron detenidos en la localidad francesa de Dax el 10 de enero de 2003, momento en el que integraban la cúpula de ETA a las órdenes de Mikel Albizu, Antza, arrestado en Francia en octubre de 2004.
  
El experto antiterrorista francés ofreció ante el Tribunal toda una serie de elementos hallados en el curso de la instrucción que siguió a las detenciones que confirman, por un lado, la existencia de las actividades de extorsión de la banda y, por otro, la vinculación de los acusados con la misma.
  
Entre otras cosas mencionó parte de la documentación incautada a Ibon Fernández Iradi, Susper, cuando fue detenido en 2003, y que iba dirigida a uno de los pistoleros de ETA responsable de recopilar potenciales objetivos en España.
  
Broglio aseguró que miles de empresarios vascos eran amenazados por ETA, que intentaba en esa época multiplicar sus medios financieros, y que el aparato de información de la banda obtenía información detallada sobre el patrimonio de los empresarios para determinar los virtuales objetivos del impuesto revolucionario y la cantidad exigible a cada uno.
 
80 terroristas no fichados
  
Por otra parte, Durey informó también de que el número de terroristas de ETA en situación de clandestinidad en Francia en octubre de 2004 oscilaba entre 70 y 80 personas. Para ello hay que tener en cuenta que en los años 2003 y 2004 se produjeron una media de 50 detenciones en suelo francés.
  
Quizás por ello, el experto antiterrorista francés consideró que los miembros de ETA tenían menos riesgos para cobrar sus extorsiones en España que en Francia, dado que corrían más peligro los etarras no fichados en territorio galo que los ya fichados en España por las Fuerzas de Seguridad.

Temas

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario