L D (EFE) Los dos terroristas, que son primos y naturales de Hernani (Guipúzcoa), viajaban en un vehículo cuando han sido detenidos y no han opuesto resistencia. Ambos han sido trasladados a la comisaría de la ciudad fronteriza, a la espera de que se les notifique la euro-orden en su contra por pertenencia a banda armada.
Los arrestos se han producido en cumplimiento de una euro-orden española emitida contra ellos, de las docenas que se han activado en los últimos meses por la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
El 7 de mayo de 2007 ambos fueron procesados por el juez Ismael Moreno junto a otros catorce miembros, responsables y colaboradores del llamado entramado Donosti, entre ellos el presunto jefe de los grupos de ETA, Garikoitz Azpiazu, alias "Txeroki".
Este grupo tenía la orden de cometer un atentado en el caso de que falleciera el preso etarra José Ignacio de Juana Chaos durante su huelga de hambre y disponía de al menos 180 kilos de explosivos.
Años antes, en diciembre de 2002, Garikoitz Pascual, fue absuelto por el Tribunal Supremo de un delito de colaboración con banda armada por falta de pruebas, después de que éste recurriera una anterior sentencia de la Audiencia Nacional que le condenaba a cinco años de prisión.
En la sentencia de 2002, la Sala de lo Penal del Supremo estimaba el recurso presentado por el presunto miembro del entramado Donosti, ya que la única prueba contra él era su declaración ante la Policía.
Los arrestos se han producido en cumplimiento de una euro-orden española emitida contra ellos, de las docenas que se han activado en los últimos meses por la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
El 7 de mayo de 2007 ambos fueron procesados por el juez Ismael Moreno junto a otros catorce miembros, responsables y colaboradores del llamado entramado Donosti, entre ellos el presunto jefe de los grupos de ETA, Garikoitz Azpiazu, alias "Txeroki".
Este grupo tenía la orden de cometer un atentado en el caso de que falleciera el preso etarra José Ignacio de Juana Chaos durante su huelga de hambre y disponía de al menos 180 kilos de explosivos.
Años antes, en diciembre de 2002, Garikoitz Pascual, fue absuelto por el Tribunal Supremo de un delito de colaboración con banda armada por falta de pruebas, después de que éste recurriera una anterior sentencia de la Audiencia Nacional que le condenaba a cinco años de prisión.
En la sentencia de 2002, la Sala de lo Penal del Supremo estimaba el recurso presentado por el presunto miembro del entramado Donosti, ya que la única prueba contra él era su declaración ante la Policía.