L D (Agencias) En declaraciones a Europa Press, Ayesa destacó que, sólo en el día de hoy–en alusión al miércoles–, han tenido conocimiento de que cinco empresarios navarros había recibido cartas de ETA e indicó que los días transcurridos del presente mes se habrían recibido una veintena más de misivas. En las mismas, ETA reclama unas cantidades "bastante superiores" a las que pedía habitualmente y, si bien precisó que "hay un abanico muy amplio", en algunas se llega a exigir hasta 200.000 y 300.000 euros.
Por todo ello, Ayesa denunció "el goteo constante" de cartas de extorsión que están recibiendo los empresarios navarros, con un contenido más agresivo que las recibidas anteriormente y que están fechadas durante el pasado mes de junio.
Precisamente el martes, el presidente de la patronal vasca Confebask, Miguel Lazpiur, denunció una "sucesión continua" de cartas de extorsión de la banda terrorista ETA a empresarios, que son propias de "mafiosos y absolutamente condenables".
Además, fuentes de la lucha antiterroristas consultadas por Europa Press adelantaron el pasado fin de semana que la banda terrorista había remitido al sector industrial vasco una nueva remesa de misivas –a tercera desde el primer envío posterior a la ruptura de la tregua el 5 de junio– redactadas con un tono muy distinto al empleado durante los meses de lo que la propia ETA denominó como "alto el fuego permanente".
Las misivas elevan considerablemente el tono de amenaza al empresariado vasco al avisar de que si no pagan las cantidades económicas exigidas la siguiente carta será remitida a sus familiares. Esta técnica ha sido utilizada por ETA en numerosas ocasiones antes de que se produjera el "alto el fuego permanente".