(Libertad Digital) Es la segunda vez que los actores materializan las estrategias del PSOE. La primera se gestó en la entrega de los premios Goya. Allí nació la pegatina que ahora se pondrá José Blanco, organizador del PSOE, para acudir a votar este domingo. Los actores y cantantes hacían realidad las movilizaciones a las que luego se apuntaban los líderes socialistas. Al amparo de las pancartas, Zapatero ha desarrollado la mayor parte de su discurso político y, ahora, la campaña electoral. La plataforma “Actores contra la Guerra” era el enlace de la web del PSOE que se presentaba como la postura oficial del partido contra la guerra.
Con el “caso Mendiluce” ocurre lo mismo. En Ferraz hay un lógica molestia por el hecho de que un eurodiputado del PSOE forje candidatura propia para unas elecciones. El 10 de febrero de este año, Trinidad Jiménez no podía ocultar su rechazo hacia el compañero de partido. Desde el Foro Tribuna Barcelona, la candidata dijo que Mendiluce no alcanzaría ni el 5 por ciento de los votos. Así que invitó al candidato verde a “reflexionar” su retirada para no “fraccionar el voto de la izquierda”.
Después del episodio de este jueves en el Círculo de Bellas Artes donde los actores y cantantes prohibieron hablar a Mendiluce “si no es pa retirarte”, como dijo Sabina, llega el análisis de Enrique Barón, número dos de Trinidad en la lista de Madrid y ex jefe de Mendiluce en el europarlamento: el veto ha sido “acertado”. Es más, si algo es criticable fue la reacción del candidato de Los Verdes. En este sentido dice lamentar que se acusara a los artistas de “sectarismo”.
Le invita a “irse con sus amigos políticos”
Dice Baron que "en un sistema democrático, cada uno tiene que asumir sus responsabilidades. El no se puede quejar de que haya otros que hagan esa valoración. Tiene derecho a presentarse, como los otros tienen el derecho a formular una crítica". Y añade que "todos somos libres de expresar nuestra opinión, pero sí parece razonable lo que he visto que le han dicho. No es un problema de sectarismo. En este momento, una candidatura de ese tipo puede conducir a lo que le han dicho".
Según el presidente del grupo del PSOE en el Parlamento Europeo, Mendiluce debería haber tenido "los nervios un poco más firmes" y no arremeter contra una "plataforma formada por gente que si algo ha hecho en la vida es luchar por la libertad de expresión". Barón subrayó que, a la vista del panorama electoral en Madrid, la candidatura de Mendiluce "no es un voto de izquierda" y "puede entregar el Ayuntamiento a la derecha. El "número dos" del PSOE exigió "responsabilidad" al líder de los Verdes y le invitó a "irse con sus amigos políticos", aunque admitió que su candidatura es "legítima".
Borrón y cuenta nueva: discos de Sabina gratis
Con todo, José María Mendiluce prefiere no pasar al día de reflexión como polémico y esconde su rencor. El gesto fue regalar discos (comprados en tienda) de quien le prohibió hablar, de Sabina, porque “ante todo hay que dar ejemplo de que se es demócrata”. Dice que "hablé de un tipo de izquierdas sectarias y dije que son izquierdas derrotadas", recordó el candidato, quien explicó que, "lo que quería decir, es que es mejor no ser sectario y ser abierto y, ante todo, hay que dar ejemplo de que se es demócrata para poder ganar".
Así que, todo olvidado para Mendiluce: "En cualquier caso ese acto acabó y para mí es un incidente cerrado y, hacia delante, todos amigos".
Con el “caso Mendiluce” ocurre lo mismo. En Ferraz hay un lógica molestia por el hecho de que un eurodiputado del PSOE forje candidatura propia para unas elecciones. El 10 de febrero de este año, Trinidad Jiménez no podía ocultar su rechazo hacia el compañero de partido. Desde el Foro Tribuna Barcelona, la candidata dijo que Mendiluce no alcanzaría ni el 5 por ciento de los votos. Así que invitó al candidato verde a “reflexionar” su retirada para no “fraccionar el voto de la izquierda”.
Después del episodio de este jueves en el Círculo de Bellas Artes donde los actores y cantantes prohibieron hablar a Mendiluce “si no es pa retirarte”, como dijo Sabina, llega el análisis de Enrique Barón, número dos de Trinidad en la lista de Madrid y ex jefe de Mendiluce en el europarlamento: el veto ha sido “acertado”. Es más, si algo es criticable fue la reacción del candidato de Los Verdes. En este sentido dice lamentar que se acusara a los artistas de “sectarismo”.
Le invita a “irse con sus amigos políticos”
Dice Baron que "en un sistema democrático, cada uno tiene que asumir sus responsabilidades. El no se puede quejar de que haya otros que hagan esa valoración. Tiene derecho a presentarse, como los otros tienen el derecho a formular una crítica". Y añade que "todos somos libres de expresar nuestra opinión, pero sí parece razonable lo que he visto que le han dicho. No es un problema de sectarismo. En este momento, una candidatura de ese tipo puede conducir a lo que le han dicho".
Según el presidente del grupo del PSOE en el Parlamento Europeo, Mendiluce debería haber tenido "los nervios un poco más firmes" y no arremeter contra una "plataforma formada por gente que si algo ha hecho en la vida es luchar por la libertad de expresión". Barón subrayó que, a la vista del panorama electoral en Madrid, la candidatura de Mendiluce "no es un voto de izquierda" y "puede entregar el Ayuntamiento a la derecha. El "número dos" del PSOE exigió "responsabilidad" al líder de los Verdes y le invitó a "irse con sus amigos políticos", aunque admitió que su candidatura es "legítima".
Borrón y cuenta nueva: discos de Sabina gratis
Con todo, José María Mendiluce prefiere no pasar al día de reflexión como polémico y esconde su rencor. El gesto fue regalar discos (comprados en tienda) de quien le prohibió hablar, de Sabina, porque “ante todo hay que dar ejemplo de que se es demócrata”. Dice que "hablé de un tipo de izquierdas sectarias y dije que son izquierdas derrotadas", recordó el candidato, quien explicó que, "lo que quería decir, es que es mejor no ser sectario y ser abierto y, ante todo, hay que dar ejemplo de que se es demócrata para poder ganar".
Así que, todo olvidado para Mendiluce: "En cualquier caso ese acto acabó y para mí es un incidente cerrado y, hacia delante, todos amigos".