La Junta de Andalucía gasta más del doble en publicidad de autobombo que en ayuntamientos

L D (Pedro de Tena) Otros datos de referencia indican que Chaves destinó a la reforma del Palacio de San Telmo, sede de la Junta de Andalucía, 16 millones de euros más de lo que dedica a los municipios en todo un año. Por si fuera poco, la Junta gasta en esta materia tres veces más de lo que gasta la propia Generalidad de Cataluña, que sólo destinó 24.

El presidente del PP andaluz y vicesecretario de Política Territorial, Javier Arenas, subrayó ayer que la Junta de Andalucía gastó un total de 259 millones de euros durante los tres últimos años en publicidad institucional –86,3 millones al año–, lo que supone más del triple que la Generalidad, ya que el tripartito presidido por el socialista José Montilla destinó 24 millones en el ejercicio 2007.

Durante una reunión presidida por el presidente del PP, Mariano Rajoy, con alcaldes populares en Ciudad Real, el líder andaluz lamentó que el Gobierno de Chaves dedique una media diaria de 240.000 euros millones de euros a partidas superfluas, a pesar de los tiempos de crisis que afectan al país, mientras que los ayuntamientos apenas reciben financiación por parte de la Junta de Andalucía. “A pesar de los tiempos de crisis que afectan al país y a los españoles, estas son las políticas de austeridad que están dispuestos a poner en marcha los socialistas", aseveró el líder popular.

Por último, el presidente del PP de Andalucía puso como ejemplo que el año pasado 100 empresas andaluzas recibieron más financiación que los ayuntamientos o que mientras que 770 consistorios sólo recibieron 36 millones de euros para políticas de vivienda, la restauración del palacio residencial de Chaves, en su segunda fase, costará a los andaluces 52 millones de euros, concluyó.

Más datos sobre la publicidad institucional andaluza pueden verse en este enlace.

Recuerden que Javier Arenas dijo que el reparto de la publicidad institucional en Andalucía rozaba los límites del Código Penal y que El Mundo y ABC, además de la COPE, se sienten discriminados de dicha publicidad que no se distribuye con criterios objetivos de audiencia sino con criterios políticos partidarios.