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La Guardia Civil precinta la "herriko taberna" de Zamudio entre protestas de los proetarras

Este viernes ha quedado clausurada la "herriko taberna" de Zamudio (Vizcaya) donde se vendían bonos para financiar a ETA. Los agentes de la Guardia Civil extrajeron documentación del local e identificaron a la docena de simpatizantes de Batasuna-ETA que protestaban contra la medida. El juez Grande Marlaska fue quien dictó la orden de cierre este jueves, una decisión en la que no contó con el apoyo de la Fiscalía. Mientras, el Gobierno vasco se ha quejado de que sigan vigentes "instrumentos jurídicos del pasado" y exigió la legalización "ya" de los batasunos.

L D (Agencias) Un total de cuatro dotaciones de agentes de la Guardia Civil se encargaron de clausurar el local sobre las diez horas de este viernes. Cuando apareció la Guardia Civil, en el establecimiento, había colocada un cartel de "Ésta es vuestra paz". En el exterior, un grupo de simpatizantes de la banda portaban pancartas en las que se leía "La represión no es el camino" y "Democracia para Euskal Herria".
  
Los agentes se incautaron en el local de una caja con documentación e identificaron a una docena de simpatizantes de Batasuna-ETA que protestaban a gritos contra el cierre de la "herriko taberna". A esa misma hora, Miren Azcarate, la portavoz del Gobierno vasco, se refería en una entrevista en ETB al partido ilegalizado y el cierre del local de Zamudio. Azcarate exigió la legalización "ya" de Batasuna-ETA, porque en la mesa de partidos "tienen que estar todas las formaciones políticas en pie de igualdad".
 
En cuanto al cierre de la herriko taberna, dijo que "es muy difícil gestionar nuevos tiempos con instrumentos del pasado y aquí los instrumentos jurídicos que se pusieron en marcha durante la segunda etapa del Gobierno de Aznar, no han cambiado". Y se refirió también a la acción de los jueces, que dictan sus sentencias atendiendo a este marco jurídico "por mucho que desde distintas instancias se defienda que las leyes se aplican atendiendo al contexto social y al entorno de la sociedad en la que se aplica".
 
"Cobertura" a ETA y Batasuna
 
Grande Marlaska dictó la medida cautelar del cierre de dicha sede por su supuesta vinculación con la venta de bonos utilizados por ETA para financiarse, encontrados tras la detención del presunto responsable de Ekin, Ibon Meñika, el pasado 18 de abril. En el momento del arresto, Meñika llevaba en su vehículo 90 bonos de 60 euros cada uno, con cuya venta entre simpatizantes de la organización contribuía a aportar recursos económicos a la banda terrorista.

En el auto, el magistrado asegura que "la necesidad actual de proceder a la clausura de los locales indicados se infiere de cómo, una vez intervenida su actividad económica" en el año 2002, "se ha podido comprobar que continúa dando cobertura e infraestructura a los fines criminales imputados". Además, el juez estima que "en la misma 'herriko' se procedieron a vender bonos tendentes a la financiación de las campañas electorales en que se presentaba la ilegalizada Batasuna, principalmente en el transcurso del año 2004". La orden de cierre había sido solicitada por la AVT y Dignidad y Justicia, pero no así por la Fiscalía. 

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