L D ( EFE ) El portavoz del grupo popular en el Ayuntamiento bilbaíno, Antonio Basagoiti, anunció este miércoles la presentación de una moción al pleno del Consistorio del próximo día 29 para que se debatan las consecuencias económicas "negativas" de la propuesta del lehendakari.
Según dijo, Bilbao es la ciudad vasca "más afectada" por dicho plan desde un punto de vista económico, entre otras razones, porque parte de una situación "preocupante" y porque en esa ciudad están ubicadas "las principales empresas vascas y algunas españolas". Se preguntó, en este sentido, si "seguirían el BBVA e Iberdrola" en Bilbao con el plan de Ibarretxe en marcha. Basagoiti criticó que el "positivo" cambio que está registrando la ciudad en materia urbanística no tiene reflejo en un mejor funcionamiento de la economía debido a las políticas nacionalistas "desacertadas", que, según dijo, "ahuyentan la inversión". Aseguró, en este sentido, que la juventud más y mejor formada se está marchando de la ciudad, a lo que se suma que "sigue habiendo el desempleo de siempre".
Según los datos que aportó y que atribuyó al Instituto Nacional de Estadística, casi la mitad (44 por ciento) de los 14.332 bilbaínos de entre 25 y 34 años que se marcharon de Bilbao entre 1998 y 2002 cuentan con Bachiller o títulos superiores. En dicho período, 2002 registró el mayor número de jóvenes (un total de 3.307) que abandonaron la ciudad. Basagoiti, que aseguró que en ninguna otra ciudad española se produce tal "fuga" de jóvenes, alertó de que esta situación es "susceptible de empeorar" y "más jóvenes pueden irse y puede haber más paro" con la aplicación del plan de Ibarretxe. El PP considera que el Ayuntamiento de Bilbao "no puede seguir mirando para otro lado", por lo que la moción citada plantea que exprese su preocupación por "el alto coste económico y social" que dicho plan tiene para la comunidad y la capital vizcaína.
El texto señala como argumento que su aprobación supondrá "una pérdida de competitividad" para las empresas y alerta de los efectos que tendrá sobre la inversión empresarial, dada "la incertidumbre institucional" que aporta el plan, y del riesgo de que empresas con domicilio en el País Vasco se trasladen a otro sitio, ya que "la secesión del resto de España conllevaría el pago de aranceles por vender nuestros productos". Además, según indica, la Comunidad Autónoma del País Vasco "depende comercialmente de la España con la que se quiere romper"; "el abandono de la UE que provoca el proyecto del lehendakari supone el abandono del euro" y "la separación del resto de España supondría asumir una parte de la deuda externa" y, por tanto, "un aumento" de impuestos y de tipos de interés.
Según dijo, Bilbao es la ciudad vasca "más afectada" por dicho plan desde un punto de vista económico, entre otras razones, porque parte de una situación "preocupante" y porque en esa ciudad están ubicadas "las principales empresas vascas y algunas españolas". Se preguntó, en este sentido, si "seguirían el BBVA e Iberdrola" en Bilbao con el plan de Ibarretxe en marcha. Basagoiti criticó que el "positivo" cambio que está registrando la ciudad en materia urbanística no tiene reflejo en un mejor funcionamiento de la economía debido a las políticas nacionalistas "desacertadas", que, según dijo, "ahuyentan la inversión". Aseguró, en este sentido, que la juventud más y mejor formada se está marchando de la ciudad, a lo que se suma que "sigue habiendo el desempleo de siempre".
Según los datos que aportó y que atribuyó al Instituto Nacional de Estadística, casi la mitad (44 por ciento) de los 14.332 bilbaínos de entre 25 y 34 años que se marcharon de Bilbao entre 1998 y 2002 cuentan con Bachiller o títulos superiores. En dicho período, 2002 registró el mayor número de jóvenes (un total de 3.307) que abandonaron la ciudad. Basagoiti, que aseguró que en ninguna otra ciudad española se produce tal "fuga" de jóvenes, alertó de que esta situación es "susceptible de empeorar" y "más jóvenes pueden irse y puede haber más paro" con la aplicación del plan de Ibarretxe. El PP considera que el Ayuntamiento de Bilbao "no puede seguir mirando para otro lado", por lo que la moción citada plantea que exprese su preocupación por "el alto coste económico y social" que dicho plan tiene para la comunidad y la capital vizcaína.
El texto señala como argumento que su aprobación supondrá "una pérdida de competitividad" para las empresas y alerta de los efectos que tendrá sobre la inversión empresarial, dada "la incertidumbre institucional" que aporta el plan, y del riesgo de que empresas con domicilio en el País Vasco se trasladen a otro sitio, ya que "la secesión del resto de España conllevaría el pago de aranceles por vender nuestros productos". Además, según indica, la Comunidad Autónoma del País Vasco "depende comercialmente de la España con la que se quiere romper"; "el abandono de la UE que provoca el proyecto del lehendakari supone el abandono del euro" y "la separación del resto de España supondría asumir una parte de la deuda externa" y, por tanto, "un aumento" de impuestos y de tipos de interés.