A veces, el PSOE parece un boxeador tambaleante a punto de desmoronarse sobre la lona. A veces, Rodríguez parece el listillo tramposo que aprovecha las marrullerías para dar unos cuantos golpes bajos a la Libertad y la Democracia.
No debe perderse de vista que Rodríguez tiene un proyecto muy claro de corte trotalitario y que todos los días lo hace avanzar. Puede que no esté en sus cabales, pero eso no le resta eficacia y capacidad de maniobra. Puede que incluso asuma que para acabar con España sea necesario acabar con el PSOE. Y me temo que el PP de Rajoy está en el mismo juego.
1que bien que bien...ojala esta secta sociata se destroce entre ellos ,sera la unica manera de que españa salga del pozo donde esta chusma la han metido. el socialismo es un cancer para la democracia,destruye todo lo que toca