(Libertad Digital) Episodios como la quema de fotos de la monarquía en Barcelona por radicales independentistas quedó este sábado ampliamente superado por la puesta en escena de las Juventudes de Esquerra, que no dudaron en quemar y enterrar la Constitución y que concluyó con el grito "muera el Borbón" pronunciado por un diputado en las Cortes, el independentista Joan Tardá.
Mientras el PPC tuvo que acreditar su permiso para repartir en la calle ejemplares de la Constitución española, los republicanos no tuvieron problemas para poner en escena el acto contra el Estado que fue anunciado hace unos días mediante una esquela en los periódicos.
Un grupo de ellos portó un ataúd con el nombre de la Constitución para simular su entierro. El féretro fue posteriormente quemado. Después, llegó el turno de las proclamas políticas: el invitado estrella, el parlamentario Joan Tardá, no dudó en llamar "corrupto" al Tribunal Constitucional, según recogió la Cope. Y concluyó su discurso con un "viva la República y muera el Borbón".
El Mundo relata que en esta ocasión no ardieron fotografías de la Corona, quizás por los procesos judiciales abiertos contra los individuos que en actos similares pudieron ser identificados, pero los manifestantes sí portaban caricaturas sobre la monarquía o la tauromaquia. También se cantó Els Segadors y se pidió la independencia de Cataluña.
Tras el acto, El Mundo se puso en contacto con Tardá para preguntarle por su proclama en el acto. El diputado justificó su "muerte al Borbón" diciendo que "se utilizaba comúnmente como proclama durante la Guerra dels Segadors".