La droga,que procedía de Turquía, ha sido localizada en Madrid y en la localidad de Argeles-Sur-Mer, al sur de Francia; y los cuatro miembros de la organización han sido acusados de un delito contra la salud pública dentro del operativo bautizado con el nombre de “Galgo”, según informó la Policía.
Las investigaciones se iniciaron en enero, al detectar la existencia de un grupo organizado que podría dedicarse a la introducción y posterior distribución en España de importantes cantidades de heroína procedente de Turquía. El grupo investigado estaba dirigido por un ciudadano con pasaporte sueco, de origen curdo-iraní y afincado en la provincia de Barcelona donde regentaba dos establecimientos de hostelería.
Dos subordinados, de nacionalidad francesa, estaban a las órdenes del cabecilla de la banda y se dedicaban a recoger, transportar el dinero y almacenar la droga en caletas donde esconder el estupefaciente, situadas en territorio francés.
Las pesquisas revelaron que el sospechoso contaba con proveedores de la droga en Turquía y con colaboradores franceses, residentes en zonas próximas a la frontera española de La Junquera (Gerona), encargados de realizar labores de recepción, transporte y entrega de las partidas de heroína a los distribuidores que operaban en escalones inferiores.
Los agentes localizaron en el vehículo una factura de alquiler de un hangar ubicado en la localidad francesa de Argeles-Sur-Mer. Acto seguido, comunicaron a la Policía Judicial de Perpignan la ubicación del almacén, que registró el local y halló 76,5 kilogramos de heroína repartidos en paquetes de medio kilo. Los agentes galos detuvieron también a otro miembro de la organización.