Una delegación del Senado, encabezada por su presidente, Javier Rojo, iniciará el próximo jueves una visita institucional a Arabia Saudí -invitados por el Consejo Consultivo (Cámara Alta) de este país-, con el fin de estrechar las relaciones y fomentar las inversiones de empresas españolas en el país.
La delegación la integran, además de Rojo, el vicepresidente segundo del Senado, Juan José Lucas, los portavoces del PSOE, Carmela Silva; Entesa, Ramón Aleu; CiU, Jordi Vilajoana; y grupo Mixto, José María Mur, y los senadores del PP Tomás Burgos, y PNV Iñaki Anasagasti.
La delegación, que estará en Arabia Saudí hasta el 21 de marzo, será recibida en audiencia por el Rey Abdullah bin Abdelaziz, según fuentes de la Cámara Alta.
Además, se han concertado entrevistas con el presidente del Consejo Consultivo y con el ministro de Justicia -para examinar cuestiones relativas a terrorismo internacional-, así como con el gobernador de Riad y con el presidente de la Cámara de Comercio saudí.
El presidente del Senado, Javier Rojo, ha asegurado que la finalidad de esta visita, que tendrá también carácter económico, es ayudar a fortalecer las relaciones con España y ha recalcado el "interés" del Gobierno en que se realice.
La visita institucional del Senado es respuesta a la invitación formulada por el presidente del Consejo Consultivo, Abdullah Bin Mohammed Bin Ibrahim Al-Sheikh, y es devolución de la que, en octubre de 2010, realizó una delegación de esta institución saudí a España.
El propio Rojo reconocía esta semana que el Senado llevaba "tiempo" intentando programar este viaje que, finalmente, tendrá lugar en medio de las revueltas populares que viven los países árabes.
El temor a que se reproduzcan en Arabia Saudí las revueltas de Túnez y Egipto, que han acabado con los regímenes del tunecino Zine el Abidine ben Ali y el egipcio Hosni Mubarak, ha motivado el anuncio del Ministerio del Interior saudí de que adoptará todas las medidas necesarias para impedir la organización de protestas.
También esta semana, el ministro de Exteriores del país árabe, Saud al Faisal, amenazó con "cortar el dedo" de quien se entrometa en los asuntos internos del país.
El presidente del Senado recalca que España tener "más presencia política" en esta parte del mundo porque hay "intereses importantísimos" para las empresas españolas.
"Es interés también del Gobierno que vayamos, vamos para ayudar y fortalecer las relaciones entre los dos países", señaló Rojo.
Se refirió así a uno de los grandes proyectos en desarrollo en el país árabe, la construcción y explotación de la futura línea de alta velocidad entre La Meca y Medina, a cuya adjudicación opta un consorcio de empresas españolas.