El vicesecretario de Comunicación del Partido Popular, Esteban González Pons, se mostró convencido de que los populares serán "decisivos" en las próximas elecciones autonómicas en Cataluña y manifestó su objetivo de sus votos "sirvan", para lo que reconoció que "sobre lo básico" el PP será capaz de entenderse tanto con los socialistas como con CiU.
En una entrevista concedida a Europa Press, González Pons insistió en el "decisivo" papel que jugará el PP en los próximos comicios catalanes y recordó la "posición generosa y altura de miras" que ha demostrado en el País Vasco, lo que a su juicio les acredita ante la opinión pública como unos socios "honestos, honrados y con sentido común para cualquier gobierno que se tenga que formar".
Según fuentes populares consultadas por Libertad Digital, sondeos internos apuntan a que CiU tendrá una fuerte subida en los comicios mientras que el PP se mantendrá "o incluso subirá" frente a la bajada del PSC y de sus aliados políticos.
En este sentido, Pons considera que la "revitalización nacionalista" del discurso del PSC hace que muchos votantes de centro y de centro-izquierda "no se sientan tentados con ser socios de ERC" y busquen una alternativa de voto, donde podrán encontrar al PP con una candidata "diferente" como Alicia Sánchez Camacho.
González Pons no aclaró qué socios de gobierno preferirían los populares e insistió en que, "de momento", su objetivo es que sus votos "sirvan". Sin embargo, recordó que tanto con los socialistas en el País Vasco como con CiU durante la etapa de Gobierno de José María Aznar han tenido ya "experiencias de colaboración".
Según recordó, el pacto en el País Vasci fue posible pese a las "extraordinarias diferencias" con los socialistas, ya que en política se debe ser "responsable" y "hacer aquello que los ciudadanos esperan con sentido común que hagas". A su juicio, esto se puede trasladar a Cataluña tanto con el PSC como con CiU con el "profundo debate sobre la crisis económica y el desempleo".
"En Cataluña, como en el resto de España, el desempleo es dramático, las víctimas del paro son muchísimas y la destrucción empresarial es imparable -sostuvo-. Yo creo que entendernos sobre lo básico y lo esencial es hacerlo sobre la recuperación económica, y podemos hacerlo tanto con CiU como con los socialistas".
El Estatuto catalán "no condicionará" a las elecciones
Además, rechazó que las decisiones del PP tras las elecciones catalanas se vayan a tomar por "cálculo político" y garantizó que los acuerdos siempre los ha tomado "con documentos por delante y con la intención de procurar un bien común". "No haremos en Cataluña ninguna componenda que tenga que ver con algo que pueda ventilarse fuera de Cataluña", garantizó.
A su juicio, estas alianzas tampoco estarán condicionadas por la futura sentencia sobre el Estatuto, que según recordó obedece al derecho a "preguntar" al Tribunal Constitucional "por aquello que pensamos que puede ser inconstitucional". Además, enfatizó que, en caso de ser declarado inconstitucional, "la culpa no es de nadie sino del que hizo la norma inconstitucional".
Los conflictos del PP: la guerra del agua y el blindaje
González Pons también hizo referencia al anuncio del presidente de La Rioja, Pedro Sanz, de recurrir el blindaje del Concierto vasco y defendió que este asunto no es un conflicto interno del PP sino un conflicto entre comunidades autónomas. "No son intereses encontrados entre miembros del Partido Popular, son intereses que deben ser conciliados entre la comunidad autónoma vasca y la comunidad de La Rioja", insistió.
De esta forma, rechazó que las diferencias entre el líder de los populares vascos, Antonio Basagoiti, y el presidente riojano abra un nuevo frente en el partido y recordó que cada uno tiene la obligación de representar los intereses de su comunidad autónoma. "Es un conflicto externo al PP", reiteró preguntado por el recurso de La Rioja.
En este contexto, respecto al Estatuto de Castilla-La Mancha, confirmó que todavía no existe una redacción definitiva del texto pero se mostró partidario a encontrar un "clima" en el que sea posible alcanzar un acuerdo que satisfaga a todas las partes, y que a su juicio debería reconocer la libre circulación del agua por España y el derecho de todas las comunidades "a tener un desarrollo en el futuro".
Para el dirigente popular, el "problema" surgió con la derogación del Plan Hidrológico Nacional, con lo que el agua se ha convertido "en un campo de batalla innecesariamente". "Lo cierto es que los ríos no deberían ser motivo de enfrentamiento entre los españoles porque, tal y como preveía el Plan Hidrológico, el agua debe ser de los españoles", reflexionó.
Así, no se pronunció sobre la posibilidad de que el texto incluya una reserva de 6.000 hectómetros cúbicos y subrayó que él está a favor de un texto que dé satisfacción "a todas las partes implicadas", ya que rechazó hacer valoraciones sobre "fuegos artificiales".
La crisis política en Baleares
Por último, González Pons también abordó las próximas elecciones autonómicas en Baleares y afirmó que la comunidad recibirá los comicios "como una casa en llamas recibe el agua". "Necesita aire fresco y necesita un soplo de brisa que despeje las nubes negras que planean sobre el Gobierno balear", apuntó.
Respecto al ex presidente autonómico balear Jaume Matas, recordó que todavía no ha podido declarar como imputado y criticó que haya sido "citado" con seis meses de antelación, "mucho". El vicesecretario de Comunicación del PP no quiso valorar si Matas cumpliría hoy el código de buenas prácticas del partido y recordó que el sumario de la causa es secreto y sólo se conoce "lo que se filtra".
Además, recordó que el PP no es partido de gobierno en Baleares y ahora está ejerciendo la labor de la oposición, por lo que "las cuentas que los miembros del partido tengan que pagar, las pagan desde la oposición sin ningún perjuicio para los ciudadanos".