L D (Agencias) El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ordenó este viernes el ingreso en prisión del dirigente de Batasuna-ETA Joseba Álvarez y la portavoz de Askatasuna-ETA Ohiana Agirre bajo la acusación de integración en ETA. En el caso de Álvarez, el delito supondría una reiteración del ya cometido por su pertenencia a Batasuna-ETA. La orden llega horas después de la detención en Guipúzcoa de 23 dirigentes del brazo político de ETA.
Los dos acusados, que ingresarán en la cárcel de Soto del Real, llegaron a la Audiencia Nacional pasadas las 10,30 horas de este viernes y declararon durante 50 y 15 minutos, respectivamente, ante el titular del Juzgado Central de Instrucción número 5.
La Fiscalía solicitó su ingreso en prisión tras acusar a Álvarez de "convocar, dirigir e instigar" la manifestación pro-amnistía que se celebró en San Sebastián el pasado 9 de septiembre y a Agirre de participar en este acto y en otras ruedas de prensa de la organización Askatasuna, que presta apoyo a los presos de ETA.
Joseba Álvarez, que sólo accedió a contestar preguntas de su abogado, Kepa Landa, sobre su participación en la concentración, negó este extremo ante el magistrado, según indicó el defensor. Landa precisó que su cliente no estuvo presente durante el desarrollo de la concentración y añadió que la acusación de la Fiscalía tiene un carácter "instrumental" y tiene por objeto implicarle "en otra cosa".
Por su parte la abogada de Oihana Agirre, Ainhoa Baglietto, aseguró que Garzón no tiene competencias para investigar las actuaciones delictivas que pudieron cometerse en la manifestación de San Sebastián, ya que no ha solicitado la inhibición necesaria al Juzgado de Instrucción número 4 de San Sebastián, que instruyó una causa por los desórdenes públicos que se produjeron al final de la marcha.
Aclaró que la acusación de pertenencia a organización terrorista que pesa contra su cliente se basa únicamente en su participación en ruedas de prensa de Askatasuna, organización que presta apoyo a los presos de ETA.
Asimismo, señaló que el juez no renovó el pasado mes de febrero la suspensión de actividades que pesaba sobre Askatasuna por lo cual "no puede establecerse ningún vínculo con ETA". Fuentes fiscales precisaron no obstante que esta organización se considera aún "alegal".