Gallardón respondía así a las palabras de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, sobre la conveniencia, o no, de que el vicealcalde, Manuel Cobo, se encuentre en las listas electorales para el Consistorio en mayo de 2011, tras el expediente al que está sometido dentro de su partido por criticar abiertamente a la jefa del Ejecutivo.
Ese asunto, dijo el alcalde, "ya ha sido contestado por quien podía hacerlo, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que anteayer recordó que la lista de Madrid en su totalidad es competencia de la dirección nacional del partido".
Hasta en siete ocasiones se preguntó durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno al primer edil madrileño sobre las polémicas que han sacudido su partido en las últimas semanas, sin obtener más respuesta que un lacónico: "No voy a hacer declaraciones".
"No voy a entrar en ese tema, ni en las consideraciones formales ni en las de fondo. Creo que es lo mejor que puedo hacer en beneficio del mi partido. Pido disculpas por no contestar directamente sus preguntas, pero entiendan que en este caso creo que lo mejor que puedo hacer por mi partido es no entrar a contestar a ningún tipo de afirmaciones o hipótesis", explicó.
Y eso fue lo que repitió al ser preguntado por la entrevista de Aguirre en la que tachaba al regidor de "intervencionista", sobre su ausencia en el Comité Ejecutivo Regional del partido y sobre las palabras de varios consejeros asegurando que el asunto de los presuntos espionajes es un tema sin importancia.
Finalmente, en relación a las alegaciones presentadas por Cobo ante el Comité nacional de Derechos y Garantías sobre la propuesta de sanción de un año de suspensión de militancia por la polémica entrevista en la que criticaba la intervención de Aguirre en Caja Madrid, el alcalde confirmó que "ya se ha entregado el escrito" pero evitó pronunciarse sobre su contenido porque "son sus destinatarios, los miembros del Comité, los que deben conocerlo".