os recordamos...un fuerte abrazo
No se puede olvidar este atentado hasta que se sepa quienes fueron los ejecutores y por supuesto los ideólogos, es decir, LOS BENEFICIADOS POLITICAMENTE HABLANDO, que muchos sabemos quienes son y otros tanto quieren seguir INGNORANDOLO. Saludos.
¡Esto sí que es un ejemplo de educación para la ciudadanía! Bermúdez: debería darte vergüenza!
A mi lado , separada por una cortina ,estaba una joven treintaañera
conectada a multitud de aparatos y sondas, No podía mover ni un
dedo de su cuerpo, no podía hablar ni respirar espontáneamente y
según el decir de las enfermeras que la cuidaban tampoco se enteraba de nada. Sólo su madre, una mujer esperanzada que acudía cada tarde a la misma hora a leer en voz alta y para su hija unas páginas de un libro de recuerdos, era consciente de que la enferma oía y sentía. Bueno a decir verdad también a mi me pareció que un día una lágrima se deslizaba por el rostro de la joven pero con el paso del tiempo y el fluir de la memoria tengo que reconocer que tal vez fue más bien el fruto de un deseo que la propia realidad. Padecía la enfermedad de Guillain Barré y al decir de mis colegas su pronóstico era infausto. Pasaron los días y las semanas y los meses y ya en otros lugares tuve conocimiento que la joven había evolucionado favorablemente hasta el punto de que había sido trasladada a un centro de recuperación de paralíticos. La última información que llegó a mis oídos fue de su propia madre quien dijo que su hija había vuelto a trabajar al comercio de siempre donde era muy bien valorada y que se había ido a vivir sóla porque como había hecho toda su vida gustaba de ser independiente. ¡Y pensar que nadie daba un duro por ella¡.Bueno, ni por ella ni por mi que voy por el mundo dando brincos con un hígado nuevo.
Señor Moris: Usted y su señora son un ejemplo monumental de dignidad.
Por culpa de la enfermedad, a malas penas se le oye, pero se ha expresado usted con la mayor claridad y mayor coherencia; que toda la casta política junta.
Es lo que esta sociedad espera que diga nuestros “lideres políticos” Pero, ¿Qué podemos esperar de un gallardón, de un rajoy, de una cospedad, de un arriola y señora, etc.?
Le deseo una pronta recuperación y me sume usted a los que no olvidan lo inolvidable.
Gracias a don Grabiel Moris y a su esposa, son el testimonio de la dignidad. Nunca olvidaré el 11M y siempre pediré saber la verdad para que se haga justicia.
Queremos saber porque los que "querían" saber ya no quieren saber. Queremos que se establezca el verdadero origen y la trama del mayor atentado terrorista de nuestra Historia desde Paracuellos del Jarama (noviembre 1936).
Anoche vi la entrevista a Don Gabriel Moris, y me emocionó.
Le deseo de corazón, su pronta recuperación y como bien dice al final de la entrevista... yo tampoco olvido lo inolvidable.