Estrepitoso fracaso del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Según han confirmado fuentes oficiales, el jefe del Ejecutivo no ha conseguido convencer a Tomás Gómez para que abandone sus pretensiones de ser el cabeza de lista del PSM a las elecciones autonómicas a favor Trinidad Jiménez.
En caso de que la actual ministra de Sanidad decida optar al cargo, el partido tendría que celebrar elecciones primarias en octubre, extremo que Zapatero ha intentado evitar a toda costa.
Después de que el viernes el presidente cancelara abruptamente el encuentro que tenía previsto con Gómez, ambos dirigentes se han reunido en secreto durante una hora para intentar llegar a un acuerdo. Ha sido inútil, y el actual secretario general de los socialistas madrileños le ha transmitido su intención de presentarse a las elecciones.
Según informaron desde Ferraz, en la reunión, que se sugiere tensa, "se ha acordado apostar por los mecanismos de democracia interna" en las candidaturas para las elecciones autonómicas de 2011.
La cita se producía en una jornada en la que la tensión se hacía con la vida interna de los socialistas hasta el punto de que el veterano Gregorio Peces Barba asegurando que "la presión" a la que la dirección federal estaba sometiendo a Gómez no era "democrática".
Un panorama de crisis interna del que el PP también tiene opinión. Su vicesecretario general de Política Autonómica y Local, Javier Arenas, criticó que Zapatero haya convertido la política española en "el culebrón de Tomás y Trini", y lamenta que sea él quien tiene la obligación de sacar a España de la crisis.
Arenas, que visitó el núcleo poblacional de San Pedro Alcántara, en Marbella (Málaga), para participar en el comité ejecutivo local del PP, lamentó que, mientras a los ciudadanos "les preocupa la economía, el empleo y el recorte de las inversiones", los socialistas "están preocupados por el debate de primarias sí, primarias no".
Así las cosas, finalmente, todo parece indicar que Gómez gana el primer pulso y se mantiene como candidato a rivalizar contra Esperanza Aguirre en las autonómicas del próximo año a la espera de la celebración de primarias.