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ETA intenta asesinar a un escolta con una bomba lapa en el centro de Bilbao

Los terroristas de ETA intentaron asesinar este martes al escolta Gabriel Ginés colocando una bomba lapa en su vehículo, que estalló cuando había recorrido con el coche unos 400 metros. Según informó Interior a Europa Press, el artefacto estaba compuesto por entre medio y un kilo de amonal y habría sido colocado junto al depósito de gasolina. Ginés sufre quemaduras en el cuatro por ciento de su cuerpo y heridas de diversa consideración en cara y en la mano. Es la primera vez en la que la banda atenta directamente contra un escolta. 

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Los terroristas de ETA intentaron asesinar este martes al escolta Gabriel Ginés colocando una bomba lapa en su vehículo, que estalló cuando había recorrido con el coche unos 400 metros. Según informó Interior a Europa Press, el artefacto estaba compuesto por entre medio y un kilo de amonal y habría sido colocado junto al depósito de gasolina. Ginés sufre quemaduras en el cuatro por ciento de su cuerpo y heridas de diversa consideración en cara y en la mano. Es la primera vez en la que la banda atenta directamente contra un escolta. 
L D (Agencias) El secretario de Estado de Interior, Antonio Camacho, confirmó que  el coche en el que ETA colocó la bomba-lapa es un vehículo profesional. Concretamente un Renault Megane, vehículo asignado al servicio de escoltas y que pertenece a la empresa de seguridad privada, Seguriber, que presta servicios para el Gobierno central.
 
La explosión se produjo a las 13.25 horas de este martes en la calle Zamacola, del barrio bilbaíno de La Peña, cuando el escolta había recorrido unos 400 metros de recorrido llano. Según el Departamento vasco, el artefacto era una bomba-lapa, compuesta por entre medio y un kilo de amonal, que habría sido colocada en la parte posterior derecha del coche, junto al depósito de gasolina, y se habría activado con el movimiento por un dispositivo de mercurio.
 
Vecinos del barrio explicaron que el escolta herido salió por su propio pie tras las explosión registrada en su vehículo y estuvo respondiendo a las  preguntas de un agentes de la Policía Municipal. Un vecino, que llegó al lugar de los hechos "justo después de la explosión", relató que vio "un coche en llamas y un hombre herido de 1,80 de altura con quemaduras importantes en la cara". El escolta, según indicó, "estaba sentado en un parque" situado al lado de donde se produjo la explosión, podía caminar. Además, podía responder a las preguntas que le realizaba un agente de la Policía.
 
El escolta, Gabriel Ginés, de 36 años, natural de Zaragoza y militante del PP en la localidad aragonesa, fue atendido en un primer lugar por emergencias de Osakidetza (servicio vasco de salud) y, posteriormente, evacuado en una UVI móvil al Hospital de Cruces, en la localidad vizcaína de Baracaldo. Según el parte médico, hecho público por el director médico del centro, Julen Ballestero, sufre quemaduras de segundo grado en la cara, en la región frontal, nasal y malar, y de tercer grado en el dorso de la mano derecha, que, en conjunto, suponen el cuatro por ciento de la superficie de su cuerpo. Presenta, además, una herida incisa no penetrante a nivel escapular derecho. Mantiene la situación hemodinámica, respiratoria y nivel de consciencia absolutamente normales.
 
El herido ha quedado ingresado en la Unidad de Grandes Quemados "para vigilarlo correctamente y tratar que su vida no corra peligro", según explicó Ballestero, quien señaló también que la herida que más preocupa es la que presenta en la mano.
 
Según afirmó el alcalde de Baracaldo, Tontxu Rodríguez, el escolta está "cabreado" por haber sido víctima de un atentado en el que resultó herido. Rodríguez estuvo en el hospital con la madre, la familia y los compañeros del escolta, que "dentro de unos días se iba a Zaragoza porque acababa su trabajo", según declaró el primer edil baracaldés a los periodistas en la puerta del hospital.
 
Todo parece indicar que el atentado iba dirigido específicamente contra este escolta que trabaja para una empresa privada de seguridad (Seguriber). Lo que no está claro es si se encontraba libre de servicio, ya que aunque protegía al concejal del PSE de Galdácano Juan Carlos Domingo, éste se encuentra estos días de vacaciones fuera del País Vasco, o si, por el contrario, se dirigía a hacer un servicio de sustitución.
 
La explosión también afectó a otras tres personas, con lesiones de carácter leve, afectadas por la onda expansiva del atentado, según informaron fuentes del Departamento vasco de Interior. Por el momento, no ha trascendido a dónde serán trasladados estos tres heridos en el atentado.
 
A escasos metros del lugar del atentado hay un parque infantil y a unos cincuenta metros de un centro de enseñanza secundaria, cuyos alumnos permanecieron dentro del edificio durante más de una hora. Según relataron a Efe estudiantes de este instituto, la explosión hizo retumbar el edificio y los cristales y provocó el "pánico" entre los alumnos, que fueron tranquilizados por sus profesores.

Dos horas después de la explosión, pasadas las tres de la tarde, los agentes de la policía vasca aumentaron considerablemente el cordón policial alrededor del atentado mientras continuaban recabando datos sobre la explosión.
 
Reacción del protegido
 
El concejal socialista Juan Carlos Domingo se declaró "hecho polvo" tras conocer el atentado y afirmó que la acción terrorista buscaba directamente al escolta. El concejal, que se encuentra en Valencia, aseguró en una conversación telefónica con Efe que el atentado ha sido perpetrado contra el coche que habitualmente usa el escolta.
 
"Estamos hechos polvo tanto yo como mi familia", reconoció el edil, que expresó todo su "cariño" hacia el escolta herido, uno de los dos que se encargan habitualmente de su seguridad. "Lo han preparado más contra él que contra mí", consideró el concejal, como apreciación tras conocer que la bomba fue adosada por los terroristas a los bajos del vehículo que frecuentemente utiliza el escolta.
 
Confusión en la información
 
Los datos del atentado de ETA han resultado confusos durante buena parte del día. Para empezar, poco después de conocerse la noticia, algunos medios de comunicación informaron del fallecimiento del escolta Gabriel Ginés, un hecho que apenas media hora después ha tenido que ser rectificado.
 
También han variado sustancialmente los datos sobre las circunstancia de la explosión y en qué vehículo había sucedido. En un primer momento se informó de que la bomba-lapa había estallado al abrir el conductor la puerta del vehículo, este hecho hizo que se llegase a poner en duda que la bomba fuese lapa, para conocerse posteriormente que el vehículo se encontraba en marcha. Sobre el coche, se dudó durante parte de la tarde si el coche que estaba utilizando el escolta era el personal o el profesional.
 
Los escoltas solicitaron en julio llevar su arma 24 horas
 
Los escoltas que prestan servicio en País Vasco y Navarra solicitaron a principios de julio la licencia del tipo B, conocida como de autoprotección, y que les habilita para ir armados las 24 horas del día, pero aún no han recibido respuesta por parte del Gobierno. Por el momento, los escoltas tienen que acudir a la armería de su empresa a diario para devolver la pistola cuando finalizan el servicio. Por este motivo, puede darse el caso de que un escolta que trabaje en Álava o Guipúzcoa tenga que trasladarse a Bilbao todos los días para devolver la pistola si allí se encuentra la sede de su empresa.

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