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ETA amenaza ahora a Francia con "extender el conflicto" si no colabora en la negociación

La banda terrorista ETA ha extendido ahora sus amenazas al Gobierno francés. En un juicio contra varios etarras encargados del apoyo logístico a los terroristas, el procesado Iñaki Esparza Luri ha acusado a Francia, en un comunicado leído ante el tribunal, de practicar un "negacionismo absurdo" y una "política del avestruz" con la que se arriesga a "agravar" la situación. Según Esparza, mientras Francia "no reconozca la realidad del conflicto, éste perdurará". Mientras ETA amenaza justo un día después de que Chirac apoyara "sin ninguna duda" la negociación, la extorsión a los empresarios no ha cesado en los ocho meses de "alto el fuego".

L D (Agencias) El etarra Esparza Luri, al que se juzga en Francia junto a Asier Oyarzabal y otro cinco presos más de ETA por el apoyo logístico a la banda del zulo de Chernobil, amenazó con la posible "prolongación y extensión del conflicto" si este país no se suma al proceso de paz.

Esparza Luri, que leyó un texto durante el juicio que se celebra este viernes en la tercera sala del Tribunal Especial de lo Criminal de París, hizo un llamamiento al Gobierno francés para que "no desaproveche la oportunidad que se dibuja" en la actualidad. Asimismo, acusó al Ejecutivo francés de apostar por una "estrategia de agravamiento de la situación". "Mientras que el Estado francés no reconozca la realidad del conflicto, éste perdurará", sentenció. El ex dirigente de ETA no hizo referencias al Gobierno español.

Paralelamente, lanzó un llamamiento a la opinión pública francesa para que apoye "el derecho inalienable del pueblo vasco a decidir sobre su futuro". Completó su mensaje con un "reconocimiento fraterno y caluroso" a todos los que han apoyado "la lucha por el pueblo vasco", al tiempo que denunció la "mascarada" que para la banda terrorista supone este juicio al estar la justicia, según él, sometida al "poder político".
 
Esparza Luri es uno de los catorce juzgados por el Tribunal Especial de lo Criminal de París, en la vista que se abrió este viernes a miembros de ETA encargados del apoyo logístico a la banda, incluido el que fuese supuestamente su jefe hasta septiembre de 2001, Asier Oyarzabal Txapartegui.
 
La "única solución", la independencia

A continuación, Oyarzabal tomó la palabra, en otro mensaje al Tribunal, para erigirse en portavoz de la que fuese su compañera, Oihane Errazkin Galdós, que se suicidó en una cárcel parisiense en julio de 2004. "Ella les habría dicho que no pierdan el tiempo con estrategias represivas. Hace ocho meses que ETA ha cesado sus actividades armadas y ustedes siguen sin reconocer los derechos del pueblo vasco", dijo, en nombre de Errazkin, Oyarzabal, quien al igual que sus compañeros de banquillo, llevaba una camiseta con la fotografía de la etarra fallecida.

El ex dirigente de la logística de ETA subrayó que la única solución al "conflicto" del País Vasco pasa "por su derecho legítimo a la autodeterminación" y recalcó que "todos los caminos alternativos son erróneos". Siempre en nombre de su fallecida compañera que, según dijo, forma parte de "la larga lista de vascos exterminados en las prisiones francesas y españolas", Oyarzabal lanzó al tribunal: "podrán condenarnos pero no juzgarnos".

Tras reconocerse militante de ETA, Oyarzabal suscribió todo lo que supuestamente habría dicho su compañera de haber comparecido este viernes en el tribunal y terminó su discurso en euskera y al grito de "Gora ETA" (viva ETA en vasco).

 
Juicio en Francia
 
El presidente del Tribunal, Jean Pierre Getti, apostilló las dos intervenciones de los jefes etarras y dijo "no aceptar" que se califique el juicio de "mascarada". "Nosotros somos magistrados libres y responsables", dijo el juez.
 
En el proceso comparecen 14 acusados. Siete de ellos están recluidos en cárceles francesas: Esparza Luri, Oiarzábal, María Dolores López Resina (55 años), Alberto Ilundain Iriarte (45), el francés Didier Aguerre (30), Juan Ángel Ochoantesana Badiola, 52 años, y Laurent Guimon, de 37 años, francesa y compañera sentimental de Esparza Luri.
 
Asimismo, otros dos etarras son juzgados en rebeldía, Zigor Garro Perez e Ibon Gogeascoechea, y una de las encausadas, Ohiane Errazquin Galdós, falleció tras suicidarse en prisión en 2004. Por último, comparecen en libertad otros cinco procesados, todos miembros de la familia Erbina, los padres, de 81 y 73 años, y sus tres hijos, de entre 40 y 49 años, propietarios de la finca de Rivière-Saas-et-Gourby, en el País Vasco francés, donde estaba localizado el zulo, que fue descubierto por la policía francesa en julio de 2002.

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