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El TS sostiene que Bermejo no cometió delito al cazar sin licencia

El Tribunal Supremo ha rechazado este martes la admisión a trámite de la querella presentada por un particular contra el ex ministro Mariano Fernández Bermejo por haber cazado en dos fincas ubicadas en Andalucía sin tener licencia para ello.

El Tribunal Supremo ha hecho público este martes un auto en el que se rechaza la admisión a trámite de la querella presentada por un particular contra el ex ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, por haber cazado en dos fincas ubicadas en Andalucía sin tener licencia para ello. La querella, que ha sido archivada, acusaba al socialista de haber cometido un presunto delito relativo a la protección de la fauna.

Los magistrados de la Sala de Penal, presidida por Juan Saavedra, han concluido que los hechos denunciados no son constitutivos de delito, aunque señalan en el documento judicial que Bermejo sí podría haber incurrido en una infracción administrativa por cazar sin licencia.

La querella, presentada el pasado 10 de marzo por A.G.J, imputa al socialista de haber matado  "careciendo de licencia para realizar dicha actividad" a cuatro ciervos en una cacería que tuvo lugar entre el 7 y el 8 de febrero pasado en la finca Navaltoro y a varios jabalíes en el coto Cabeza Prieta, ambos endel municipio de Andujar (Jaén), a la que también asistió el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón.

Sin embargo, estima el Alto Tribunal, competente para juzgar a los aforados nacionales como el actual diputado del PSOE, que dichas actividades no pueden “subsumirse en el artículo 335 del Código Penal, relativo a la protección de la fauna”. Por ello, el Supremo acuerda archivar dicha causa.

La Junta de Andalucía sancionó el pasado mes de marzo con una multa de 2.000 euros al ex-ministro por cazar dos días en dicha comunidad sin tener licencia. Dichas actividades cinegéticas no sólo le costaron 2.000 euros a Fernández Bermejo, sino también su puesto al frente de la cartera de Justicia. El hecho de que el entonces ministro socialista se fuese a cazar con el juez Baltasar Garzón, cuando éste estaba instruyendo la operación Gürtel, constituyó todo un escándalo. Zapatero se vio obligado a forzar la dimisión de Bermejo.

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