No entiendo nada, toda fase instructora (sumario, diligencias previas, urgentes, o simplemente fase instructora) es secreta, o reservada hasta la apertura del juicio oral (Artículos 301 y 649 de la L.e.crim.). Eso quiere decir que las diligencias sumariales o instructoras –las que se practican en la fase de instrucción- solo pueden ser conocidas por el órgano jurisdiccional, Ministerio Fiscal y partes personadas, y POR NADIE MÁS. Otra cosa es que, como ha sucedido, parte o todo el sumario se declare EXPRESAMENTE SECRETO INCLUSO PARA LAS PARTES PERSONADAS –implicados-, nunca para el Ministerio Público ni para el órgano jurisdiccional –Art. 302 de la L.e.crim.-, Este especial secreto se levantará siempre en el plazo de días antes de la apertura del juicio oral como mínimo, y será esa concreta fecha- la apertura del juicio oral-, momento procesal que no se ha alcanzado todavía en el denominado CASO GURTEL cuando los actos del procesos SON PUBLICOS para toda persona con interés en su conocimiento (prensa, ciudadanos en general).
INSISTO NO ENTIENDO QUE SE HAYA DADO UNA PUBLICIDAD DESMEDIDA A UNA ACTUACIONES SUMARIALES O ISNTRUCTORAS QUE POR EL ESTADO PROCESAL DE LA CAUSA DEBERÍAN SER TODAVÍA RESERVADAS Y NO PÚBLICAS, y que de lo contrario debería suponer responsabilidades pecuniarias y penales según de quien proceda la revelación indebida –Art. 301 L.e.crim.- Y MENOS ENTIENDO, como el contenido de este comentario todavía no ha sido puesto de manifieste por NADIE.
ESTOY TOTALMENTE DE ACUERDO CON EL COMENTRARIO DE UN COLEGA QUE RESUME ASÍ: ..."¿Por qué no se pasan los fotógrafos de la Gaceta por los sótanos de la Conserjería de Hacienda, por ejemplo, los días de Navidad? ¿Porqué no hacen guardia en Navidad en los portales de cualquier minimundo spoezista y fotografían la caravana de cajas, cajones y otros mas, de regalos que llegan?"...
Montesin, como muy bien dice usted, ese esperpento vergonzante, sicario del desgobierno de turno llamado "justicia", está dejando claro una vez más el sectarismo y vileza que lo mueve, la indecencia y el "hacer por encargo" de sus actuaciones, que mientras exalta la paja en el ojo ajeno oculta la viga en el propio...
La clase política actual en su conjunto, difícilmente puede superar la ignominia e indecencia permanente que les mueve, lejos de hacer su trabajo para la sociedad es ésta la que les sirve de negocio propio, a la que ordeñan lo que sea necesario para sus fines altamente lucrativos, es su "corral" de auténtico ganado que todo lo traga, son reflejo y fruto a su vez (que es lo terrible), de una sociedad podrida y envilecida, ignorante y falsa, inhumana, apesebrada, hipócrita y en desidia permanente....
Simplemente lo que hay son unos pastores a la altura del borreguerío, teatro y humo al servicio del poder para esconder la cruda realidad de una gestión deplorable, de unas consecuencias terribles para muchas familias, de la ruina de todo un país, de la miseria al por mayor...
La cara dura y el desprecio a la corrupción que tenéis, hacen estos titulares como que dan a entender que lo que realmente importa en toda esta trama de corrupción es "si ha habido filtraciones o no a la prensa"
una prepotencia y unas ganas de lavarse las manos una y otra vez.
Los fachas dan asco
La justícia, en este país, es tan ramera y barriobajera como la prensa y la clase política.
El descredito de la justicia llega en este páís ya a la burla del ciudadano y por supuesto, a la mofa de los derechos de los procesados en cualquier tipo de procedimiento.
Que todo esto haya estado sometido al "secreto de sumario" cuando el Boletín Oficial de El País había venido filtrando practicamente todo so contenido y exhibido imùdicamente incluso en sede parlamentaria en Valencia es toda una inmensa burla a la sociedad.
Qué corto se quedó Pacheco cuando dijo que la justicia en este país era un cachondeo. Pues no Sr. Pacheco, ya no es un cachondeo. Ahora es una vulgar chirigota donde el secreto de sumario ni es secreto ni es sumario ni es nada.
Es una simple heramienta en manos de cuatro descerebrados que ponen y nombran a los jueces para que les hagan el trabajo sucio de enlodar al oponente político y poco más.
Un organismo al servisio de la política sectaria, de los lobbys feministas y de los bancos para "meter en cintura" al que se salga del camino indicado por el bufón de turno.
Todo esto es una broma de mal gusto, en un país donde se han recalificado urbanisticamente millones de hectáreas, y no siempre a cambio de trajes, bolsos o relojes.
Basta ver la ostentación a diestra y a siniestra.
Se los ha comido EL PAIS.