L D (Agencias) Acompañado por el Jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire, el general del Aire José Jiménez, el monarca tomó tierra en la base aérea de Armilla poco después del mediodía a bordo de un helicóptero Superpuma pilotado por él mismo. Tras recibir los honores de ordenanza y pasar revista a las tropas, Don Juan Carlos, con uniforme de vuelo, recibió durante media hora información actualizada sobre el funcionamiento y las últimas misiones de la base, que no visitaba desde 1995.
Luego fue guiado por las instalaciones de la Patrulla Aspa y departió con personal de la base en la plaza de Armas. Con posterioridad, el monarca recibió una breve explicación sobre las prestaciones del helicóptero HE-25 Colibrí, momentos antes de pilotarlo durante unos 15 minutos junto al jefe del escuadrón de enseñanza del Ala 78 –la Escuela de Helicópteros del Ejército del Aire encargada de proporcionar los conocimientos técnicos y prácticos sobre el pilotaje de este tipo de aeronaves–.
De origen franco-alemán y con capacidad para cinco personas, este helicóptero Colibrí, capaz de alcanzar los 278 kilómetros por hora, entró en servicio en España en el año 2000, aunque hizo su primer vuelo en junio de 1995. Es usado para la enseñanza básica de las labores de pilotaje entre los miembros de las Fuerzas Armadas y la Guardia Civil.
Tras pilotar el helicóptero, Don Juan Carlos recibió en la torre de mando a autoridades civiles y militares, entre las que se encontraban el subdelegado del Gobierno central en Granada, Antonio Cruz, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Augusto Méndez de Lugo, el delegado del Gobierno andaluz, Jesús Huertas, y los alcaldes de Granada y Armilla, entre otros.
Desde allí, el Rey presenció una exhibición de los cinco helicópteros HE-25 Colibrí de la Patrulla Aspa pilotados por profesores de la escuela, que mostraron su destreza acrobática con cruces, distintas maniobras de alto rendimiento y posturas de formación como las denominadas "Generalife" y "Alhambra".
La Patrulla Aspa inició su andadura el 24 de septiembre de 2003 y sus pilotos son oficiales del Ejército del Aire que compaginan sus cometidos como miembros de esta patrulla con sus labores como instructores de vuelo en el Ala 78. En el Ala 78, con sede en la base aérea de Armilla, se imparte tanto enseñanza militar de perfeccionamiento como enseñanza de formación.
La primera de ellas se dirige no sólo a alumnos del Ejército del Aire, sino también a los de los otros dos Ejércitos, de la Guardia Civil y de países extranjeros, mientras que la enseñanza de formación incluye fases de vuelo avanzado en helicópteros de los alumnos del Ejército del Aire de las escalas Superior de Oficiales y de Oficiales del Cuerpo General, fundamentalmente.
La presencia este miércoles del Monarca en la base aérea de Armilla, donde el Príncipe de Asturias siguió en 1996 un curso de piloto de helicópteros durante su etapa de formación militar, se enmarca en el programa anual de visitas que tradicionalmente hace el Rey a las distintas unidades del Ejército repartidas por España.
El aeródromo militar de Armilla fue inaugurado como tal el 21 de junio de 1922; años después, en 1955, se creó la Escuela Elemental de Pilotos y en 1980 comenzó su andadura el Ala de Enseñanza 78.