El PSOE trata de laminar a los diputados díscolos de Madrid con graves acusaciones sin pruebas

L D (N. G. Mostazo) Muchos son los que han alzado su voz desde el PSOE para laminar a Eduardo Tamayo y a Maite Sáez, los dos diputados díscolos que se ausentaron en la primera votación celebrada en la Asamblea de Madrid. Las especulaciones empezaron poco después de su espantada , ya que tanto José Luis Rodríguez Zapatero, secretario general del PSOE, como Rafael Simancas, secretario general de la Federación Socialista Madrileña, dijeron que su decisión no se había producido por motivos políticos, insinuando que había otra motivación pero sin dar más datos. Como consecuencia, ya hay varios medios de comunicación que han puesto a sus periodistas a indagar en la vida y negocios de estos diputados. El País , por ejemplo, publicaba este miércoles una primera historia fruto del cotilleo , al insinuar que Tamayo y Sáez tienen una relación sentimental.

Por lo que parece, algunos medios trabajan sobre la pista “urbanística” sembrada por el presidente de la Junta de Andalucía y del PSOE, Manuel Chaves. En declaraciones a Canal Sur Radio , Chaves ha declarado que la espantada de Tamayo y Sáez es una “traición” que responde a “intereses económicos y urbanísticos”. “Hay mucha gente que quiere corromper y mucha gente que se deja corromper”, ha dicho el presidente del PSOE, para añadir que los diputados “no se ausentaron por cuestiones políticas”, ya que no manifestaron su desacuerdo en anteriores reuniones del partido, sino que su actitud responde a una “operación sucia” porque “en Madrid hay intereses económicos y urbanísticos” a los que no les conviene “que el PSOE gobierne Madrid”. Lo ocurrido en la Asamblea de Madrid, a Manuel Chaves le produce “vergüenza”, según ha mencionado, para añadir que la actuación de Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez hace “daño a la política”.

Simancas dice que “se sabrá” la verdad

En declaraciones a la Cadena SER , el candidato a la presidencia de la Comunidad de Madrid por el PSOE, Rafael Simancas, ha confiado en que “les quede algo de dignidad”, “cumplan con lo que se les ha pedido” y devuelvan sus actas de diputado, a lo que Eduardo Tamayo ha contestado ya, en declaraciones a Antena 3 Televisión (por segunda vez en dos días), que no pretende hacerlo. Simancas también ha seguido hurgando en la cuestión de los motivos de los díscolos para ausentarse en la votación y ha dicho que mantuvieron “un comportamiento incompatible con la dignidad”. Tras reiterar que “las razones de su comportamiento no son de índole político, sino de otra índole”, afirmó estar convencido de que éstas “se conocerán y sus responsables pagarán por ellas”. “Estamos hablando de un interés personal de estos dos ciudadanos, y el por qué han actuado así, sin duda se sabrá”, ha dicho Simancas, para agregar que “yo sé a quien beneficia esto, al Partido Popular inequívocamente”.

Preguntado por la posibilidad de que “la mano del PP” esté detrás de la operación, Simancas explicó que Tamayo y Sáez estuvieron en la reunión previa a la sesión constitutiva de la Asamblea sin mostrar “discrepancia alguna”, e incluso llegaron a entrar al hemiciclo para que a nadie se le pasara “por la cabeza la posibilidad que se constituyera la sesión y evitar que fuera elegida una diputada del PP”. “Las declaraciones de Eduardo Tamayo ayer ante los medios de comunicación parecían calcadas de las ruedas de prensa de Esperanza Aguirre, de Javier Arenas y de José María Aznar, los argumentos son los mismos, y jamás se han escuchado en los órganos internos del Partido Socialista”, ha dicho Simancas, que no obstante advirtió de que sus argumentos son simplemente una “constatación” y no una “acusación”.

Otras reacciones en la cresta de la ola

Aprovechando la cresta de la ola, como los surfistas, otros destacados miembros del PSOE han intentado apuntalar los argumentos expresados por Zapatero, Simancas y Chaves, entre otros. Muy crítica ha sido Matilde Fernández, concejala socialista en funciones en el Ayuntamiento de Madrid, para quien la “única” explicación que encuentra a lo sucedido “es que a estos dos (Tamayo y Sáez) los han comprado”. Por eso pidió que el transfuguismo se tipifique como delito en el Código Penal. Desde el Gobierno de Castilla-La Mancha, José Bono ha dicho que “un corrupto no puede ser moderado y un traidor nunca es moderado y, por lo tanto, no lo es ninguno de esos dos despojos humanos”.

Por su parte, el portavoz del PSOE en el Senado, Juan José Laborda, reclamó la intervención del Gobierno y del Poder Judicial porque la actitud de los diputados daña “al conjunto de las instituciones democráticas”. Para el senador socialista por Madrid Juan Barranco, que fue alcalde de la capital, si los dos díscolos no devuelven sus actas de parlamentarios “se tendría que investigar muy seriamente”, por parte de la Fiscalía Anticorrupción, su desaparición premeditada en la Asamblea de Madrid. A juicio de Barranco, las “excusas” de Tamayo “no hay quien se las crea”, por lo que sospecha que en su actitud “hay algo más”.

También Alfredo Pérez Rubalcaba, diputado y miembro de la Ejecutiva Federal del PSOE, ha terciado en la polémica afirmando que Eduardo Tamayo “no era una apuesta personal” del secretario de Organización socialista, José Blanco. El martes, Joaquín Leguina, el ex presidente de la Comunidad de Madrid, fue quien denunció que Tamayo entró en la lista electoral de Simancas gracias a Pepe Blanco, quien por cierto mantiene de momento un elocuente silencio. Sin embargo, Rubalcaba lo ha descartado y ha salido en defensa de José Luis Rodríguez Zapatero, que afronta una crisis de serias consecuencias en el interior de su partido, afirmando que el secretario general del PSOE está haciendo “un esfuerzo por dignificar la vida política”.

“Digamos que la trayectoria de Tamayo en el PSOE es muy anterior a la llegada de Blanco”, ha puntualizado Rubalcaba en declaraciones a Onda Cero , para mencionar a continuación la tesis mantenida por otros miembros de su partido, al destacar que Tamayo y Sáez pueden haber sido sobornados. “Uno tiene que llegar a la conclusión de que algo raro ha pasado y ciertamente en política no sería la primera vez que sucede una cosa de esa naturaleza”, ha dicho Rubalcaba.