A nadie le salen las cuentas. Los grupos ya habían hecho sus cabalas sobre el calendario parlamentario del final de periodo de sesiones. Comparecencia sobre la Presidencia Europea, debate del estado de la Nación, y los plenos pendientes para el mes de Julio, tras habilitarse como mes ordinario, con temas tan relevantes como el debate del techo de gasto, antesala de los Presupuestos Generales del Estado.
“Zapatero se entiende ya perdedor de este debate porque busca la fecha”, protestaba la portavoz parlamentaria del PP, Soraya Sáenz de Santamaría. “No tiene un sentido lógico sino táctico”, sentenció, para acto y seguido asegurar que el objetivo del Gobierno es “diluir” el debate. “Hace tiempo que se le ha acabado el tiempo y el crédito”.
Los portavoces parlamentarios llevaban semanas reclamándole al Gobierno las fechas que tenían en mente para la gran cita política del año. “Pero no nos ha llegado hasta hoy”, se quejan fuentes de la dirección parlamentaria del PP a Libertad Digital. “Es que el Gobierno está desbordado, estamos en minutos basura”, dice con desgana en el PP. El secretario de estado de relaciones con las Cortes, José Luis de Fracisco, ha dado traslado al presidente del Congreso, José Bono, de las fechas previstas por el Ejecutivo. Serán los días 14 y 15 de este mes. Una semana después, y tras las negociaciones con los grupos, se votará el dictamen de esta comparecencia.
“Hombre la posición del PP no deja de ser estrambótica”, replicaba José Antonio Alonso, el portavoz del PSOE. “El tiempo mínimo indispensable para realizar un debate de esta importancia son un par de semanas”, desde que termina la presidencia española de la Unión. “Y por eso los días 14 y 15 son los días óptimos, no hay la mas mínima duda al respecto”.
No opinaba lo mismo el portavoz de IU, Gaspar Llamazares: “lo hace en Julio sin ninguna duda para coger a muchos ciudadanos con el bañador puesto”. Y añade: “por mucho que el Gobierno busque fechas marginales o de agosticidad, el debate político esta servido”, asegura Llamazares reconociendo que “el Gobierno escoge unas fechas que la favorecen mas”.
Muchos debates, sin fecha
Quedan pendiente, por tanto, mucha actividad parlamentaria. Se acumulan las iniciativas legislativas, pero también los debates. Por ejemplo, hay un debate pendiente sobre Afganistán, pero el más importante es sin duda el techo de gasto, antesala de los Presupuestos Generales del Estado, y que no tiene fecha a la vista. Fuentes de la dirección del PSOE aseguran a Libertad Digital que éste “se aprobará el próximo viernes en el Consejo de Ministros”, pero su debate en el hemiciclo es un misterio.
“No hemos hablado de eso, se tendrá que fijar en el futuro”, explicaba José Antonio Alonso. “Calculo que será como en otros ejercicios”. Tampoco sabe nada sobre la comparecencia que el presidente Zapatero tiene que llevar a cabo en el Congreso para hacer balance sobre la presidencia española de la Unión Europea. “No se lo puedo confirmar, aún no se ha decidido”, aunque ya se empieza a hablar de la última semana de junio.
Adelanto electoral
A esta cita, se le suman además otras comparecencias de Zapatero en las instituciones comunitarias para darle fin a la presidencia española de la Unión Europea: en el Parlamento y el Consejo Europeo. Traducido: que este mes de Julio, nada tendrá que ver con los anteriores. Será una auténtica olla a presión, en la que salgan a borbotones los debates parlamentarios. Un escenario complicado en el que la agonía de cada votación servirá de aperitivo para el debate que puede provocar el adelanto electoral: los Presupuestos Generales del Estado.