La derrota ya ha empezado. El Cejas ya puede confirmar SU fracaso.
Debe irse lo antes posible, pero lejos lejos. Porque lo que le quedan ya son duras derrotas: elecciones municipales, autonómicas y la de su tumba política.
¡Pues veremos como no se va...!
Gana el catalanismo catalán y pierde el catalanismo, entreguista, cobarde y traidor a los suyos, del Psc; es decir, de la charnegada que reniega de lo que es para complacer al señorito; pero, no le sirve de nada porque el señorito nunca ha dejado de considerarle charnego y de ridiculizarle por traidor, sumiso, servil y rastrero.
Pequeño me parece el castigo que les han dado.
Se demuestra, de nuevo, que Cataluña es ya difícilmente recuperable para la causa nacional española, que crece el sentimiento de rechazo a los extranjeros -entre los que cuentan, naturalmente, a los españoles del resto de España.
Me encanta, sí, la guantada a Carod quien prefirió el beneficio personal, manipulando los hilos de la marioneta Montilla y el medro familiar, al apoyo a sus connaturales de CiU en el 2006.
Se demuestra, de nuevo, que aproximadamente la mitad de la población catalana se considera excluida de la vida pública catalana, por eso ni vota, y que de la mitad votante, un altísimo porcentaje es independentista y xenófoba en mayor o menor grado; es decir, en palabras de Eduardo Mendoza: "Cataluña es feudal y cerrada". Claro que gracias al feudalismo viven los sinvergüenzas y los incultos, medran los caraduras, se crecen los chulos y los matones; vamos, como en la Edad Media.
Ahora, a sacar a Zapatero de la Moncloa entre todos: a dejarle en el paro en justa compensación por los millones de personas a quienes él y su política señoritonga y femeninoide han dejado en el paro, en la incuria, la ignorancia y la pobreza moral y física.
Nada que ver con la Cataluña abierta, constructiva y adelantada de los 70-80.