El PP acude a la reunión del CGPJ para justificar su abandono en la negociación

LD (EFE) El secretario general del Grupo Popular, Fernández Díaz, ha explicado que su presencia se debía a la "cortesía" de su grupo parlamentario que, en principio, había entendido que la reunión quedaba "desconvocada" tras haber advertido de su ausencia.

El diputado del PP, que ha permanecido media hora en la reunión, ha asegurado que su partido estaba dispuesto a llegar "hasta el final" en la negociación para renovar el CGPJ, pero que no ha sido posible debido a la actitud del Gobierno y del PSOE, que "roza la falta de respeto".

Fernández Díaz ha explicado que durante la legislatura se ha "marginado" al PP en decisiones trascendentales como la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional o la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial.

"La última reflexión del ministro es la gota que derrama el vaso", ha afirmado en relación a la propuesta del titular de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, de modificar el sistema de acceso a la Judicatura.

Fernández Díaz ha asegurado que su grupo lamenta "profundamente" que no se haya podido llegar a un acuerdo y ha insistido en que hay que crear un clima de consenso que no existe en estos momentos.

 

 

Instantes después Zaplana ha reiterado, en rueda de prensa, que Fernández Díaz había acudido a la reunión "por una mera cuestión de cortesía" y ha criticado que los grupos dijeran que "les estaban esperando".

 

Para Zaplana, la posición de su grupo estaba "clarísima" y la celebración de esta reunión ha puesto de manifiesto una "simulación" o una "estrategia de corto alcance" que no conduce a "nada".

 

Zaplana anunció el pasado martes formalmente que su grupo dejaba en suspenso la negociación que mantenía con el PSOE para la renovación del órgano de gobierno de jueces y magistrados en tanto que no presentara una "propuesta razonable" global en el ámbito de la Justicia.

 

Los motivos aducidos por el dirigente del PP para esta negativa son la ruptura de "todos los consensos" en materia de Justicia por parte del Ejecutivo, en asuntos que van más allá del CGPJ, como la recusación de dos magistrados del Tribunal Constitucional o la reforma de la carrera fiscal.