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El policía que encontró la mochila de El Pozo se ratifica en que había una tartera y que los cables eran rojo y negro

El Policía Municipal Jacobo Barrero, quien encontró la mochila en un vagón en El Pozo, ratificó este lunes en el juicio que contenía un teléfono móvil con cables rojo y negro y debajo un recipiente de plástico anaranjado. Pese a que la fiscal intentó que convirtiera el negro en azul, como el encontrado en la mochila de Vallecas, Barredo dijo claramente: "Yo lo vi negro". También declaró el Tedax 54.868 que explosionó un artefacto en la misma estación, el tercero que afirma que no había hecho nunca prácticas con Goma 2 ECO. Por último compareció un agente de Policía que llegó a la estación de El Pozo y afirmó que vio dos mochilas cerca del andén.
LAS CLAVES DEL DÍA | Una tartera y cables rojo y negro
"Si hubiera habido explosivos en la Kangoo, la perra los hubiera detectado"

(Libertad Digital) El Policía Municipal contó que entró él y unos compañeros en la estación de El Pozo e inspeccionaron vagones en busca de heridos. Relató que entró en un vagón al lado de otro de los que explotaron en busca de heridos. En su revisión del vagón inferior vio una mochila "que me llamó la atención". Estaba en la mitad del vagón bajo el asiento pegado a una de las ventanas en la fila de la izquierda. Barrero narró que había luz natural. "Saqué la mochila de debajo del asiento, la abrí, la puse encima del asiento para revisarla", contó. En ella encontró un "teléfono móvil, cables rojo y negro y debajo un recipiente de plástico anaranjado". La mochila era de color negro. "Saqué la mochila y la dejé en un sitio seguro. En el andén. Al lado de la pared". Se trata de la mochila que, como adelantó Libertad Digital, sufrió una profunda transformación para que fuera idéntica a la que apareció en Vallecas.  
 
Contó el policía municipal que se lo comunicó a un policía nacional (motorista) que se hallaba en el andén para que llamara a los Tedax y aproximadamente una hora después se oyó una explosión. Según declaró, la policía municipal no se dedicó a recoger objetos de los trenes porque "la prioridad era sacar heridos".  Barrero ratificó en varias ocasiones que los colores de los cables eran rojo y negro y lo que había dentro no era una bolsa de plástico y que tenía forma "redondeada".
 
El policía dijo que al salir de la estación se encontró con unos Tedax de paisano en una furgoneta blanca, que se identificaron verbalmente y les comunicó el hallazgo de la mochila. El agente no les pidió que se identificaran porque se encontraban dentro del cordón de seguridad y para estar allí se tenían que haber identificado previamente.
 
Otro Tedax que desconoce la Goma 2 ECO
 
También declaró este lunes el testigo policial 54.868, el Tedax que desactivó la bomba de El Pozo, supuestamente la que encontró el policía municipal. Éste declaró que cuando llegó hacia las nueve menos cuarto a la estación de el Pozo se encontró en el andén un montón de objetos, bolsas, mochilas, carteras y que le llamó la atención un mochila frente al vagón 3 pegada contra la pared y con la solapa abierta hacia atrás. Según explicó, le sorprendió porque era la única bolsa sin daños y fue a revisarla. "La boca de la mochila estaba cerrada con un mosquetón, por lo que metí la mano para abrir la boca y dejar el interior al descubierto". El Tedax observó en la mochila un "teléfono móvil, cables de detonador y una bolsa de plástico azul traslúcido con una masa de color blanquecino en el interior". Presumiendo que se trataba de un artefacto se lo comunicó a su compañero, el Tedax 65255, y procedieron a desalojar la zona de bomberos y equipos sanitarios.
 
El agente explicó que intentó neutralizar el artefacto sin conseguirlo por lo que explosionó. "No fue posible rescatar nada tras la explosión. No se encontró nada. La explosión fue completa y no quedaron restos", afirmó. Aseguró tras la explosión se abrieron una a una todas las bolsas que había en el andén para revisarlas y se sacaron todos los objetos de los trenes. Tras revisar todos los bultos se dirigieron al foco de  explosión de la mochila en el interior de los trenes para recoger restos. Este Tedax declaró que desconoce cómo llegó esa mochila al andén.
 
Preguntado por el tipo de explosivo declaró que en ese momento no supo cuál era y aseguró que "nunca había hecho prácticas con Goma 2 ECO ni ninguna actuación con este explosivo". Se trata del tercer testimonio que contradice al jefe de los TEDAX, Sánchez Manzano, que durante su declaración afirmó se hacían prácticas con Goma 2ECO habitualmente.
 
Afirmó también el agente que el sistema que utilizó para neutralizar la bomba fue el usado para cualquier tipo de explosivo "excepto los muy sensibles, como la cloratita". No dijo el TEDAX de que explosivo se trataba "Nosotros nunca podemos decir qué tipo de explosivo es. Son los servicios de análisis los que determinan qué explosivo se ha usado".
 
Un agente de Policía afirma que vio dos mochilas en El Pozo
 
Un agente del Cuerpo Nacional de Policía que se acudió la mañana de los atentados a la estación de cercanías de El Pozo afirmó esta tarde ante el tribunal del 11-M que cuando accedió al andén localizó dos mochilas sospechosas, una de ellas cerrada y en la otra pudo observar a través de una apertura un teléfono móvil, del que sobresalían varios cables que se introducían en el interior de la bolsa. Aunque no pudo precisar si el teléfono estaba encendido o apagado y tampoco si estaba boca arriba o boca abajo. Sobre la mochila cree recordar que que era azul, y la que estaba cerrada cree que era oscura.
 
El agente policial subrayó que la primera mochila estaba situada cerca de la entrada por la que accedió y que al estar cerrada no pudo hacer un examen visual de su interior. Poco después vio en el andén cerca del muro otra bolsa, que presentaba una apertura. Por el orificio observó un "paquete azul" y un teléfono con una estructura cableada que se orientaba hacia el interior de la bolsa. "Se veía una bolsa de basura azul cielo y encima un teléfono, Trium de estos, aplatanado". Ante esto, el testigo desalojó la zona y avisó a las personas que se encontraban en el lugar de la presencia de un posible artefacto explosivo. El policía explicó que después avisó a los agentes de los TEDAX y que incluso se puso en contacto con un subinspector de este cuerpo, quien le comunicó que enviaría un equipo al foco de la explosión.
 
Especificó, además, que no habló con ningún agentes de la policía municipal ni nadie le comunicó antes de ver la mochila que se había encontrado un artefacto sin explosionar en este tren, si bien no negó la posibilidad de que su compañero recibiera alguna comunicación al respecto. A preguntas de la fiscal Olga Sánchez, el testigo relató que tras estas iniciativas no "volvió a entrar" en el andén porque procedió a acordonar la zona para establecer las pertinentes medidas de seguridad, por lo que "no hubo opción de mirar" más enseres y vestigios de la explosión.
 
El testigo, miembro de la unidad motorizada vinculado al departamento de Seguridad Ciudadana de la Policía, explicó que antes de desplazarse con su compañero a la estación de El Pozo, estuvo presente en la estación de Atocha tras la explosión de las bombas. Una vez allí, el testigo relató las experiencias que vivió hace tres años. "Olía a sangre y a pelo quemado, había gente destrozada, y partes de cuerpos de personas", dijo el testigo.
 
El juicio finalizó pasadas poco después de las seis de la tarde al cumplirse el programa previsto para la jornada de este lunes y se reanudará mañana a las 10 con testimoniales policiales sobre la localización y traslado de la mochila de Vallecas.

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