L D (Europa Press) Miren Azkarate, portavoz del Gobierno vasco, considera que la actuación judicial contra las últimas amenazas de los miembros de Batasuna-ETA son un "obstáculo para la paz" y la equipara con las bravuconadas de los proetaras por las que tendrán que dar explicaciones al juez Grande Marlaska. En la localidad vizcaína de Elorrio, la dirigente peneuvista ha apuntado que sería "bueno" que Batasuna no solamente "mirase a los obstáculos de un lado, sino también a los de otro lado".
Sin embargo, sus críticas se han centrado más en lo que no está siendo más que la aplicación de la ley. Ha dicho que resulta "incomprensible" para todos que, por una parte, Zapatero anuncie que da por verificada el final de la violencia y que va a comenzar el diálogo con ETA y que, "al mismo tiempo", se cite a los dirigentes de Batasuna-ETA.
Azkarate ha hablado de los dirigentes batasunos como de interlocutores, "como no puede ser de otra forma" y ahora, con la citación de la Audiencia nacional, "ven que hay presión e incluso riesgo de que puedan terminar en la cárcel". El mensaje al Gobierno central no ha faltado: "Desde ese punto de vista, en esa incomprensión y esa dualidad de actuaciones, el Gobierno desea recordar, una vez más, que indudablemente las leyes se aplican teniendo en cuenta el contexto social y el contexto social ha cambiado notablemente".