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El Gobierno vasco apoya la celebración del congreso de Batasuna-ETA

El consejero de Justicia, Empleo y Seguridad Social del Gobierno Vasco, Joseba Azkarraga, no sólo se ha mostrado favorable a que se celebre el congreso que la ilegalizada Batasuna-ETA quiere llevar a cabo, sino que ha afirmado que si se prohíbe este acto "se cometería un grave error político y también democrático, porque se estaría impidiendo la consolidación de un proceso de pacificación". Por su parte, el portavoz de los batasunos, Arnaldo Otegi, ha declarado que independientemente de cuál sea la decisión final, "tenemos la firme voluntad de celebrarlo".

L D (EFE) Joseba Azkarraga se ha referido a la polémica suscitada en torno a la convocatoria para el próximo día 21 de dicho acto en el BEC de Baracaldo (Vizcaya), diciendo que "es absurdo poner puertas al campo y más, en estos momentos en los que se requieren gestos de distensión y no actuaciones encaminadas a la reafirmación de posturas que deben superarse", ha añadido.
 
Tras mostrar su esperanza en que "todos sepamos actuar con cautela e inteligencia" ante esta polémica, el consejero y dirigente de EA ha señalado, en referencia a los simpatizantes de la ilegalizada Batasuna-ETA, que "existe una parte de la sociedad que, como cualquier otra, tiene derecho a reunirse, opinar y decidir". "Ignorar la existencia de quienes forman parte del problema, pero también de la solución del conflicto político que vive nuestro pueblo, no es más que un acto de ceguera política y un obstáculo para alcanzar la paz", concluyó.
 
Por su parte, el portavoz de los batasunos, Arnaldo Otegi, ha asegurado este jueves, al referirse al congreso que tiene previsto esta formación ilegal para el próximo día 21, que "no contemplamos un escenario de prohibición, pero, en cualquier caso, tenemos la firme voluntad de celebrarlo". En una conferencia de prensa, en la que además alertó de la existencia de "riesgos" para la puesta en marcha de un proceso de paz, Otegi ha añadido que para Batasuna se trata de "un acto democrático y de masas, las vías políticas y democráticas a las que constantemente apelan algunos" y, por lo tanto, ha considerado que celebrarlo "es nuestro derecho".
 
Ha atribuido por ello al "miedo a un cambio de escenario" y al "pánico a la libertad" que sienten "algunos sectores" cualquier intento de prohibición y, al respecto, ha comentado que para éstos "el riesgo" es "lo que podamos decir", el que "se abran posibilidades ciertas para construir ese proceso que algunos no quieren". Quiso así preguntar "cuáles son" las vías políticas y democráticas "a las que permanentemente algunos nos emplazan" y ha advertido que "no se puede estar permanentemente jugando a la gran mentira y la gran mentira es que se puedan defender y materializar todos los proyectos políticos por vías pacíficas y democráticas".

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