Ese es precisamente uno de los graves problemas, si no el que más, de la casta política actual. Que fuera de la política no son nada y ellos los saben, lo que conduce a que intenten quitarse el hambre atrasada a la mayor velocidad posible. Amén de llenar la buchaca por si se acaba el chollo y que se aferren al cargo como ladillas, argumentando desde luego que su profundo espíritu de servicio les obliga a seguir trabajando para el pueblo y que no sea posible echarlos ni con agua caliente.
De dimisiones ni soñarlo ¿A donde va a ir del dimisionado? ¿A pasear perritos cuando ha probado las mieles del Paraíso? Cuando no hay que hacer cola en el supermercado porque los mejores sonmeliers se inclinan solícitos. Cuando no hay que ir en el metro sino en coche oficial con escolta. Cuando los viajes no son en clase turista de Iberia sino en Falcon. Cuando no hay que hacer número para llegar a fin de mes porque la tarjeta Visa Oro con cargo a los tontos de siempre parece no tener fondo.
En fin, el panorama ya lo conocen ustedes de sobra. El gran problema es que nos hemos dado un sistema en el que, como diría mi abuelo, los que se hacen cargo de la cosa pública no sirven ni para tacos de escopeta.
¡Así no va!
No me diga más: prosociata, ¿no es cierto?
¿Cuántos informes habrá hecho este para que a Bono no le toque nadie?
Así esta en este país, no queda un ápice de vergüenza, este tío cobrando 80.000 € por pasear al perro y... y el inútil de Zpmentiras congelando la pensión de los miles de pensionistas que no llegan a los 500€, después de haber estado cotizando + de treinta años, todos tenemos que comer, pagar la luz, el gas el agua, que son necesidades básicas, y ZP regalando dinero a sus colegas, una vergüenza y una ya que en este país la mayoría de políticos, policías y fuerzas del Estado empezando por la justicia están corrompidos como la pesca a los ocho días a los ocho días
Qué lo lleven de asesor a la Zarzuela; ahí tiene refugio toda la inmundicia del Cni.
Si denuncias esta situación ante un político progre, rico y opresor de los pensamientos liberales de derechas seguro que te vomitará aquello de: ¡¡¡PERO SI ESTO ES EL CHOCOLATE DEL LORO!!!... Señores, soy maestro, mi sueldo es el único que entra en mi casa y... ¡coño, yo también quiero de ese chocolate!