L D (EFE) Suárez Gamboa compareció como testigo protegido en el juicio de "Santi Potros" y "Tigresa", para los que el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, pide 54 años de cárcel por tres delitos de asesinato en grado de tentativa, el de Antonio Hernández Gil, el guardaespaldas y el conductor del vehículo en el que iban en el momento del atentado, el 8 de mayo de 1986 en Madrid.
El "arrepentido" dijo que "Idoya y (José Ignacio de) Juana Chaos fueron los que accionaron el mando a distancia para que el coche saliera volando" y añadió que la orden para provocar la acción la había dado Santiago Arróspide. Suárez Gamboa explicó que la participación de Santiago Arróspide había sido meramente informativa ya que de la participación material se encargaba Idoya".
También declararon como testigos los integrantes del "comando Madrid", en prisión, Inés del Río Prada y Pedro Juan Odriozola. La primera aseguró no tener relación con los acusados a los que había conocido a través de la prensa y se retractó de las declaraciones efectuadas anteriormente ante el juez instructor, Javier Gómez de Liaño, en las que dijo que conocía a Idoya, porque según declaró "las realizó bajo amenazas".
Por su parte, Pedro Juan Odriozola dijo que conoció a los acusados después del atentado y reconoció haber proporcionado a la banda un Renault 11, coche con el que los terroristas llevaron a cabo el atentado frustrado, pero añadió que no recordaba dónde lo había conseguido ni el uso que la banda había hecho del vehículo.
El "arrepentido" dijo que "Idoya y (José Ignacio de) Juana Chaos fueron los que accionaron el mando a distancia para que el coche saliera volando" y añadió que la orden para provocar la acción la había dado Santiago Arróspide. Suárez Gamboa explicó que la participación de Santiago Arróspide había sido meramente informativa ya que de la participación material se encargaba Idoya".
También declararon como testigos los integrantes del "comando Madrid", en prisión, Inés del Río Prada y Pedro Juan Odriozola. La primera aseguró no tener relación con los acusados a los que había conocido a través de la prensa y se retractó de las declaraciones efectuadas anteriormente ante el juez instructor, Javier Gómez de Liaño, en las que dijo que conocía a Idoya, porque según declaró "las realizó bajo amenazas".
Por su parte, Pedro Juan Odriozola dijo que conoció a los acusados después del atentado y reconoció haber proporcionado a la banda un Renault 11, coche con el que los terroristas llevaron a cabo el atentado frustrado, pero añadió que no recordaba dónde lo había conseguido ni el uso que la banda había hecho del vehículo.