Según publica La Razón, esta nueva directiva es del jefe de Estado Mayor (JEME), Fulgencio Coll, y planifica los "nuevos trabajos" de los soldados, en el caso de que la situación financiera continúe estancada. Ahora, podrán asumir la seguridad de las bases, la recogida de basuras, la limpieza, la cocina, la jardinería, las "chapuzas" pequeñas... Y, a medida que el dinero se vaya acabando, será el JEME el encargado de establecer quien realizará estas agradables labores "en coherencia con los recursos económicos disponibles para la financiación de los mismos", dice la norma.
En la directiva se establece que sólo tendrán que asumirlo en caso de que "las limitaciones financieras sean de tal magnitud» que no se pueda financiar la contratación de empresas ajenas al Ejército".
Y es que, la asfixiante crisis ha provocado que la externalización de los servicios de limpieza se haya convertido en un gasto superfluo. Lo cual, además de por la nefasta gestión económica del Gobierno, se entiende por el "tijeretazo" que ha sufrido el ministerio de Carmen Chacón: ahora gestiona 1.100 millones que en 2009.