(Libertad Digital) Diputado socialista por Madrid y actual portavoz del grupo socialista en el Congreso de los Diputados, Pérez Rubalcaba fue ministro de la Presidencia entre 1993 y 1996 durante los gobiernos de Felipe González. Durante esa etapa, investigaciones periodísticas pusieron de manifiesto la implicación de miembros del Gobierno felipista en la "guerra sucia" contra ETA.
Rubalcaba negó sistematicamente la implicación gubernamental en el terrorismo de los Grupos Antiterrorista de Liberación (GAL). Tras la acción de la Justicia, y aunque Rubalcaba lo negara, varios miembros de los sucesivos gobiernos felipistas acabaron entre rejas (Rafael Vera, Barrionuevo, Sancristóbal, entre otros).
Ministro de Educación y Ciencia entre 1992 y 1993, Pérez Rubalcaba ingresó en el PSOE en 1974, en el que comenzó colaborando en la Federación Madrileña y luego, en las comisiones de Enseñanza e Investigación tanto del Partido como del Grupo Parlamentario Socialista. Con la llegada del PSOE al Gobierno en 1982, fue sucesivamente director del gabinete Técnico de la Secretaría de Estado de Universidades e Investigación (de diciembre1982 a mayo1985); Director General de Enseñanza Universitaria (de mayo 1985 a septiembre 1986); Secretario General de Educación (de 25 septiembre 1986 a 29 julio 1988); y Secretario de Estado de Educación.
Encargado de los contactos con el PP durante la tregua de ETA del 98
Doctor en Ciencias Químicas, tras las generales de 1993, en las que Rubalcaba fue elegido por primera vez diputado por Toledo, el presidente Felipe González le nombró ministro de la Presidencia y de Relaciones con las Cortes, cartera de nueva creación. En las generales de marzo de 1996, cuando el PSOE perdió frente al PP, salió diputado por Madrid.
En el 34 Congreso del PSOE de junio de 1997 fue elegido nuevo miembro de la Ejecutiva y secretario de Comunicación. Su inclusión en la lista de Joaquín Almunia, que sustituyó a Felipe González, vino a refrendar su notable relevancia dentro del partido en la nueva etapa. De hecho, Rubalcaba fue después uno los encargados de mantener contactos con el Gobierno popular sobre ETA a raíz de la tregua de 1998.
En julio de 2001 pasó al Comité Federal del PSOE
Reelegido diputado por Madrid en las elecciones de marzo de 2000, en el Congreso fue portavoz de la Comisión de Ciencia y Tecnología y vocal suplente de la Diputación Permanente. En el 35 Congreso de julio de 2001, en el que José Luis Rodríguez Zapatero fue elegido nuevo secretario General de los socialistas, Rubalcaba pasó a formar parte del Comité Federal.
Luego, encabezó la delegación socialista que acordó con el PP el denominado Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo, firmado en diciembre de 2000. Desde entonces, forma parte de la denominada comisión de seguimiento del Pacto. Formó parte, en junio de 2002, del Comité Electoral del partido, encargado del área de “planificación y respuesta”, además de uno de los coordinadores del Comité de estrategia electoral.
Ante las generales de marzo de 2004, fue responsable de Estrategia Electoral del PSOE. Tras la victoria socialista de Rodríguez Zapatero en las elecciones del 14 de marzo de 2004, Rubalcaba fue designado, el 18 de marzo, portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados, en sustitución de Jesús Caldera, que pasaría a formar parte del Gobierno socialista.
La verdad del 11-M: antes sí, ahora no
Su actuación durante los cuatro días de marzo fue especialmente destacada. El día once, poco antes de medianoche, habla para los oyentes de la Cadena SER: "Nosotros, cuando salió José Luis Rodríguez Zapatero, habíamos visto la información que había dado a los españoles el ministro del Interior, que había asegurado con mucha firmeza que era ETA. Incluso había dicho con mucha firmeza que nadie podía poner en duda la autoría de ETA. (...) nosotros en esto siempre creemos al Gobierno, y por tanto nosotros, cuando salimos, hablamos de ETA (...), del atentado más horrible que ETA ha realizado jamás en España". Mintió, ya que Rodríguez Zapatero salió a las nueve menos diez, dos horas antes de que lo hiciera Ángel Acebes y una antes que José María Aznar.
El día 13, cuando acababan de cumplirse las nueve y media de la noche, comparece ante los españoles para decir: "Los ciudadanos españoles se merecen un Gobierno que no les mienta, que les diga siempre la verdad". Es más: "Los ciudadanos quieren conocer toda la verdad sobre los terribles sucesos acaecidos en Madrid en los últimos días, y la verdad, toda la verdad, se acabará sabiendo. Ese es nuestro compromiso con las víctimas". Un compromiso que se disolvió el mismo día de las elecciones, a tenor de la actitud de los socialistas hacia la comisión de investigación, que lograron cerrar en falso. La prueba de ello son los numerosos enigmas que siguen sin resolverse y los numerosos e importantes datos que se han ido conociendo desde entonces.
Acto seguido dijo lo siguiente: "El PSOE conocía las líneas de trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad; a pesar de ello, por sentido del Estado, por respeto a la memoria de las víctimas, hemos estado callados cuando desde el Gobierno se hacían descalificaciones y afirmaciones que no siempre se han correspondido con la verdad". Jamás desveló qué informaciones tenía el PSOE y cuáles fueron sus fuentes.