(Libertad Digital) Entre noviembre de 2001 y enero de 2002, las fuerzas de seguridad detuvieron a varios terroristas pertenecientes a una célula de Al-Qaeda por su presunta colaboración en los atentados del 11 de septiembre contra los Estados Unidos. Más tarde fueron llevados a juicio, y el pasado mes de septiembre fueron condenados por la Audiencia Nacional por delitos de terrorismo, con penas de entre seis y 27 años. Los abogados de los terroristas llevaron entonces el caso ante el Tribunal Supremo. El recurso hacía que la sentencia de la Audiencia Nacional no fuera ya firme, y en consecuencia los condenados quedan en libertad cuando han cumplido la mitad de la pena, plazo que se ha cumplido para dos de ellos y se cumplirá el 17 de febrero para otros dos.
El segundo de los terroristas que ha quedado liberado por el retraso del Supremo en resolver el recurso de casación es Najib Chalb Mohamed, el pasado 20 de enero; el primero, Said Chedadi, ya lo hizo el pasado 17 de noviembre. El próximo 17 de febrero podrían quedar en libertad Mohamed Zaher Adade y Mohamed Needl Acaid, condenados ambos a ocho años y seis meses de prisión. El próximo 26 de junio seguiría el mismo camino Driss Chebli, que está siendo investigado por su posible participación en los atentados del 11-M, si el Supremo no resuelve antes el recurso. Otros de los terroristas que podrían quedar en libertad este año son Yusuf Galán (José Luis Galán), el próximo 17 de agosto y Mohamed Ghaleb, en octubre.
Vínculos con el 11-M
Uno de los condenados por la Audiencia Nacional y que podría quedar liberado el próximo 17 de febrero, Mohamed Needl Acaid, es dueño de una vivienda en Chinchón que fue sucesivamente alquilada por terroristas vinculados a los atentados de Casablanca, en mayo de 2003, y de Madrid, el 11-M.
En junio quedaría en libertad Driss Chebli, imputado por su posible participación en la masacre de Madrid del 11 de marzo de 2004. Chebli, que estaba en el entorno del El Tunecino, declaró ante el también imputado Mohamed Moussaten que "si pudiera, mataría a Aznar". Por su parte, el comisario de la Unidad Central de Información Exterior de la Policía, Rafael Gómez Menor, vinculó a Driss Chebli y Imad Eddin Barakat, alias Abu-Dahdah, a varios terroristas del 11-M, con los que mantuvieron conversaciones telefónicas en junio y septiembre de 2001. Por lo que se refiere a su participación en el 11-S, se cree que Chebli preparó el encuentro en Tarragona de Ramzi Bin Al Shibn y Mohamed Belfatmi y Mohamed Atta.