(Libertad Digital) Los dos diputados ausentes en la Asamblea de Madrid, Eduardo Tamayo y Maite Sáez, pertenecen al llamado sector de los “Renovadores por la Base” de la Federación Socialista Madrileña (FSM), cuyo líder es José Luis Balbás. En declaraciones a la Cadena SER , Eduardo Tamayo ha explicado el motivo de su ausencia. “Ha sido el fruto de un desencuentro dentro del seno de la Federación Socialista Madrileña, en la que hay un grupo de compañeros, a los cuales represento, que no estamos de acuerdo con el pacto con Izquierda Unida, porque entendemos que es un pacto que perjudica a los intereses del PSOE”, ha dicho Tamayo.
Según el diputado, el sector del PSOE al que representa ha explicado reiteradamente a la cúpula de su partido sus “múltiples dudas”, pero “nadie nos respondía”, por lo que “hemos tomado una actitud de este tipo para indicarle al compañero Rafael Simancas que no vamos a permitir un acuerdo de esa naturaleza si realmente persevera en esa idea”. Según Tamayo, “de pactar con Izquierda Unida y de girar el partido hacia la extrema izquierda, no”, porque “el PSOE no puede ceder a las exigencias bochornosas de IU”. Preguntado sobre si también se ausentará en la votación para elegir al futuro presidente de la Comunidad de Madrid, Tamayo ha dicho que “nunca” votará en contra del PSOE, pero que sí podría ausentarse en dicha votación si Simancas continúa con su “cerrazón de mantener el poder a cualquier precio”.
Algunos medios, como Telemadrid , han aportado otra tesis diferente a los argumentos mencionados por Tamayo. Según fuentes socialistas en la Asamblea de Madrid citadas por la cadena pública madrileña, Tamayo mantuvo una reunión el lunes por la noche con Rafael Simancas. Al parecer, le pidió su nombramiento como consejero de Justicia del próximo Gobierno regional y exigió que una diputada socialista concreta –de la que no han dado su nombre– no entrara en el Ejecutivo regional. Al parecer, Simancas habría rechazado su petición, por lo que Tamayo y Maite Sáez se habrían ausentado de la votación para mandarle un primer aviso. Sin embargo, en declaraciones a la SER , Tamayo ha negado rotundamente que detrás de su decisión se esconda alguna ambición personal.
Por último, el diputado regional ha explicado que, de momento, no contempla rechazar su acta de diputado en la Asamblea de Madrid, aunque ha vuelto a advertir a Rafael Simancas de que, si le asegura que el proyecto del PSOE se llevará a cabo “sin presiones” y sin que “nada enturbie” los planes de los socialistas, él estaría dispuesto a reconducir su posición. Sin embargo, si no es así, Tamayo advirtió de que incluso podría apartarse del Grupo socialista y continuar en la Asamblea defendiendo la posición de los “socialdemócratas” que han votado al PSOE y que no quieren un acuerdo con Izquierda Unida, lo que podría dar la presidencia de la Comunidad a la candidata del Partido Popular, Esperanza Aguirre.
Según el diputado, el sector del PSOE al que representa ha explicado reiteradamente a la cúpula de su partido sus “múltiples dudas”, pero “nadie nos respondía”, por lo que “hemos tomado una actitud de este tipo para indicarle al compañero Rafael Simancas que no vamos a permitir un acuerdo de esa naturaleza si realmente persevera en esa idea”. Según Tamayo, “de pactar con Izquierda Unida y de girar el partido hacia la extrema izquierda, no”, porque “el PSOE no puede ceder a las exigencias bochornosas de IU”. Preguntado sobre si también se ausentará en la votación para elegir al futuro presidente de la Comunidad de Madrid, Tamayo ha dicho que “nunca” votará en contra del PSOE, pero que sí podría ausentarse en dicha votación si Simancas continúa con su “cerrazón de mantener el poder a cualquier precio”.
Algunos medios, como Telemadrid , han aportado otra tesis diferente a los argumentos mencionados por Tamayo. Según fuentes socialistas en la Asamblea de Madrid citadas por la cadena pública madrileña, Tamayo mantuvo una reunión el lunes por la noche con Rafael Simancas. Al parecer, le pidió su nombramiento como consejero de Justicia del próximo Gobierno regional y exigió que una diputada socialista concreta –de la que no han dado su nombre– no entrara en el Ejecutivo regional. Al parecer, Simancas habría rechazado su petición, por lo que Tamayo y Maite Sáez se habrían ausentado de la votación para mandarle un primer aviso. Sin embargo, en declaraciones a la SER , Tamayo ha negado rotundamente que detrás de su decisión se esconda alguna ambición personal.
Por último, el diputado regional ha explicado que, de momento, no contempla rechazar su acta de diputado en la Asamblea de Madrid, aunque ha vuelto a advertir a Rafael Simancas de que, si le asegura que el proyecto del PSOE se llevará a cabo “sin presiones” y sin que “nada enturbie” los planes de los socialistas, él estaría dispuesto a reconducir su posición. Sin embargo, si no es así, Tamayo advirtió de que incluso podría apartarse del Grupo socialista y continuar en la Asamblea defendiendo la posición de los “socialdemócratas” que han votado al PSOE y que no quieren un acuerdo con Izquierda Unida, lo que podría dar la presidencia de la Comunidad a la candidata del Partido Popular, Esperanza Aguirre.