Según publica el diario El País, dos presos con condenas por delitos de terrorismo, Iñaki Rekarte y Andoni Muñoz de Vivar, están disfrutando de un programa especial en la cárcel de Nanclares de Oca (Álava) coordinado por Instituciones Penitenciarias y supervisado por la Audiencia Nacional.
Con este programa, los etarras pueden salir de la cárcel cada día para trabajar o estudiar con la obligación de volver a prisión los fines de semana. Los citados reclusos, condenados a 203 y 67 años de cárcel, respectivamente, antes de alcanzar este régimen específico de prisión atenuada condenaron expresamente la violencia terrorista y comenzar a satisfacer las indemnizaciones a las víctimas de los crímenes que cometieron. Según El País, también fueron expulsados de ETA.
En el caso de Iñaki Rekarte, éste perteneció al grupo Mugarri de ETA desarticulado en 1992 y actualmente cumple una condena de 203 años por un atentado con coche bomba en Santander, el 19 de febrero de 1992, en el que asesinó a tres personas. Desde su detención, ha pasado por las prisiones de El Puerto de Santa María I y Topas (Salamanca). Su proceso de acercamiento al País Vasco comenzó con el traslado, en noviembre de 2008, a la cárcel de Villabona (Asturias), donde comenzó a trabajar en el economato del centro y se dio de alta en la Seguridad Social. De ahí dio el salto a la prisión alavesa Nanclares de Oca, donde tiene un buen pronóstico de reinserción.
Por su parte, el terrorista Andoni Muñoz de Vivar fue integrante del grupo Lambroa hasta que fue desarticulado el 25 de octubre de 1994. Fue condenado a 67 años de cárcel por la colocación de tres bombas. Lleva 16 años en prisión.
Según el diario de Prisa, tanto Iñaki Rekarte como Andoni Muñoz fueron expulsados del colectivo de presos de ETA el pasado mes de enero por "haberse salido de la disciplina". En estos momentos, los dos etarras forman parte del grupo de presos etarras que han dejado de cumplir sus condenas en cárceles alejadas del País Vasco y Navarra tras distanciarse de la organización terrorista. Por este motivo, se les ha concedido este permiso especial.
Para autorizar el régimen específico de Rekarte y Muñoz, con salidas diarias para trabajar o hacer cursos de formación, se les ha aplicado el artículo 100.2 del reglamento penitenciario, que permite a Instituciones Penitenciarias flexibilizar las condiciones de cumplimiento de la condena en casos en los que el interno va a seguir programas laborales, de formación o de tratamiento médico que no podrían llevarse a cabo dentro de la prisión.
La medida concedida a Rekarte y a Muñoz de Vivar ha sido instada por la junta de tratamiento de Nanclares de Oca, concedida por Instituciones Penitenciarias y finalmente supervisada por el juez central de vigilancia penitenciara de la Audiencia Nacional, José Luis de Castro, con el informe favorable del Ministerio Fiscal.
Por su parte, el etarra José Luis Álvarez Santacristina, Txelis, también ha solicitado el paso a esa situación. Instituciones Penitenciarias está aún estudiando su petición.