Entre las personas que testifican destaca el ex subdirector general operativo de la Policía Nacional, Pedro Díaz Pintado, superior de Juan Jesús Sánchez Manzano cuando se perpetró la masacre y que ya ha pasado por el juzgado.
Díaz Pintado participó en la famosa reunión que se celebró a las 12 de la mañana del fatídico 11 de marzo. Allí recibió la llamada del comisario general de Seguridad Ciudadana, Santiago Cuadro Jaén, quien le dijo que “el explosivo utilizado es Titadyn con cordón detonante”, explosivo habitualmente utilizado por ETA. Díaz Pintado trasladó esa información al entonces ministro del Interior, Ángel Acebes, uno de los dirigentes políticos que allí se encontraban reunidos.
Horas más tarde, el mismo Cuadro Jaén le desmintió esa información que le había proporcionado por la mañana, según declaró el propio Díaz Pintado durante el juicio por los atentados en la Audiencia Nacional. “Es una dinamita sin identificar, pero no es Titadyn porque no tiene el componente de nitroglicerina”, le indicó Cuadro Jaén.
Sin embargo, hubo dos cosas que Díaz Pintado reconoció en sede judicial. La primera de ellas es que nunca llegó a ver ningún análisis por escrito de los explosivos. Y la segunda –importante, porque es una de las causas que han motivado la querella de la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M– es que la encargada de realizar “los informes periciales es la Policía Científica”.
Díaz Pintado explicó, durante la vista oral, que los Tedax tienen que saber cómo está compuesto un explosivo para poder desactivarlo, pero “no son expertos en análisis”. Son pues los agentes de la Policía Científica los que tienen la misión de realizar estas pruebas, que suelen tardar de ocho a diez días, dijo. Por tanto, según su declaración, en el pequeño laboratorio de los Tedax sólo se realizan las primeras pesquisas para poder dar unos primeros resultados con rapidez.
Sus afirmaciones durante el juicio refuerzan pues uno de los argumentos documentados de la asociación querellante: el Reglamento de los Tedax se incumplió cuando no enviaron las muestras al laboratorio de la Policía Científica. Manzano declaró en la Audiencia Nacional que los artificieros "nunca" habían enviado a la Policía Científica vestigios de explosiones. No obstante, según demostró la asociación presidida por Ángeles Domínguez, esto no sólo es una práctica habitual en caso de atentado sino que existen multitud de oficios enviados por los Tedax a la Policía Científica de firmados por el mismísimo Sánchez Manzano.
El pasado martes, el ex comisario señaló a la juez que él no dijo “nunca”, sino que se limitó a señalar que eran contadas "excepciones" los casos en que esto se hacía.