(Libertad Digital) Una semana después, adelanta El Mundo, la causa se ha desbloqueado y ya está en la Audiencia Provincial de Madrid.
Tres años sin noticias de los 200 millones pagados
La causa abierta por la que, según Amedo y Domínguez, el Gobierno de Felipe González trató de pagar su silencio durante el primer juicio de los GAL, ha estado más de tres años paralizada. Están procesados Rafael Vera, entonces secretario de Estado de Seguridad, su secretario Juan de Justo, el comisario Abel Machín y el actual jefe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, Félix Hernando.
Ahora, explica El Mundo, la Audiencia Provincial de Madrid ya tiene en poder una copia del sumario que le entregó el pasado 26 de julio la Audiencia Nacional. Será la Fiscalía de Madrid la que decida si impulsa o no el juicio contra los cuatro procesados. Se da la circunstancia de que seis días antes, y en su comparecencia ante la comisión del 11-M, Félix Hernando dio por “zanjado” el asunto. Explicó que “hasta el momento, transcurridos ya más de tres años, no se me ha comunicado la apertura de ningún sumario en dicha instancia (la Audiencia Provincial de Madrid), por lo que debo entender que el asunto está definitivamente zanjado sin responsabilidad alguna para mí”.
Acusados de malverasción de fondos públicos
Cuenta el diario de Pedro J. Ramírez que la causa no está cerrada sino que ha permanecido “olvidada, atascada y perdida en los vericuetos de los tribunales, nueve años después de que Garzón escribiera en un auto de procesamiento que en las tres primeras ocasiones (de cuatro), los encargados de transportar el dinero, por orden del señor Vera, y con conocimiento del origen y finalidad de los pagos, son Félix Hernando y Aníbal Machín Llamas, que ocupaban en ese momento los cargos de jefe del Servicio de Información Exterior y jefe del Servicio de Operaciones”.
La investigación comenzó cuando Amedo y Domínguez revelaran en El Mundo que sus esposas habían recibido 200 millones de pesetas en Suiza de manos de la cúpula socialista de Interior en los gobiernos de Felipe González. La pieza está separada del sumario 1/88 de Garzón sobre los GAL. Antes de ser parcialmente archivado sirvió para condenar a Vera y Barrionuevo por la “guerra sucia”.