(Libertad Digital) Los contactos entre socialistas y nacionalistas vascos para conseguir un pacto estable de cara a la próxima legislatura comienzan a dar sus frutos. El último guiño se producía el martes, cuando el PNV aupaba a un dirigente del PSE al frente del banco público alavés. Un panorama que, según Santiago Abascal, no debe de llevar a engaño. Según ha advertido en la COPE, la percepción de algunos medios de que el PNV se aleja de las tesis secesionistas de Ibarretxe es una "ilusión, un espejismo".
El presidente de DENAES ha destacado que, aunque el órdago ilegal del lehendakari quede finalmente rechazado, el daño ya está hecho porque ha obligado al Gobierno de Rodríguez Zapatero a ofrecer a los nacionalistas un estatuto con mucho más autogobierno. En este sentido, ha augurado que el nuevo texto anunciado por los socialistas emulará al catalán y denominará al País Vasco como una nación.
"No hay que ser optimistas porque el Gobierno propone un estatuto que iguala al de Cataluña, que dice que el euskera es una lengua oficial y que el País Vasco sea una nación", resalta.
La obligación de estudiar en vasco
El presidente de DENAES también ha criticado la marginación del castellano en el País Vasco, "una vuelta de tuerca más". Abascal ha hecho referencia a la intención del Gobierno vasco de que sea obligatorio estudiar en vasco en primaria, secundaria y, ahora también, en bachillerato. "Va contra el derecho constitucional de los españoles", sentencia.
Por otro lado, ha felicitado a la alcaldesa de Cádiz, la popular Teófila Martínez, por ondear una majestuosa bandera nacional en la ciudad. Un hecho que contrasta con lo que ocurre en otras regiones de España, como en el País Vasco, donde "la bandera se esconde en el cuarto de las escobas".