La ministra de Defensa, Carmen Chacón, se desplazó este martes hasta al Parque y Centro de Abastecimiento de Material de Intendencia del Ejército de Tierra (PCAMI), situado a las afueras de Madrid, por donde circula cada año más 3000 toneladas de equipamiento de las Fuerzas Armadas, entre raciones de campaña, vestuario y equipos para los militares españoles.
Allí, presentó el nuevo uniforme de campaña boscoso, que será común para los tres Ejércitos, y que incorpora un tejido más ligero al que se venía utilizando hasta ahora, difumina la señal de calor y lleva un nuevo patrón pixelado que procura un mejor camuflaje. "Con el nuevo uniforme de campaña, que incorpora la más alta tecnología en cada detalle, seguimos reforzando la seguridad de nuestros hombres y mujeres en todas sus misiones", dijo la ministra.
Esta versión boscosa se suma así a la versión árida, que ya se utiliza en Afganistán, y completa el proceso de renovación del vestuario de las Fuerzas Armadas. Este proceso se inició hace prácticamente un año, cuando el Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), el general del Aire José Julio Rodríguez Fernández, emitió en diciembre de 2009 la instrucción 70/2009 por la que se regulaba el diseño, composición y utilización del nuevo uniforme y equipo de campaña en las Fuerzas Armadas.
Tal y como informó Libertad Digital, los nuevos uniformes áridos comenzaron a ser repartidos durante el pasado mes de febrero en los cuarteles españoles, iniciándose este reparto por el Tercio Alejandro Farnesio IV de La Legión, acantonado en el acuartelamiento General Gabeiras en Ronda (Málaga), y perteneciente a la Brigada de la Legión Rey Alfonso XIII afincada en la base Álvarez de Sotomayor de Viator (Almería). Precisamente, fueron estos legionarios los primeros militares que utilizaron estos nuevos uniformes en Afganistán.
Acompañada por el general Luis Villanueva, jefe del Mando Logístico del Ejército de Tierra, y por el coronel José María de la Ossa, jefe del PCAMI, Carmen Chacón asistió a una exposición de material de vestuario y alimentación de las Fuerzas Armadas, y se trasladó al laboratorio y al taller de vestuario, donde se interesó por el trabajo que allí realizan civiles y militares.
Posteriormente visitó los almacenes de vestuario y equipo, y de alimentación, donde probó una de las raciones de campaña que se distribuyen a las distintas unidades militares. La ministra no dejó escapar la ocasión para alabar las raciones de campaña del Ejército, de las que dijo que "son excelentes representantes de nuestra dieta mediterránea y son muy codiciadas en los teatros de operaciones".