Entre sus argumentos para llegar a tan alta conclusión recurrió a su infancia: "Cuando yo era pequeño y no había televisión, –rememoró Rubalcaba– leíamos tebeos, y casi todos eran de guerra, como 'Hazañas bélicas'". Con ello llegó a que "nos matamos entre nosotros dos veces en el siglo XX y conseguimos que nuestras guerras fueran mundiales". Y, por fin, llegó la conclusión: votar el Tratado constitucional europeo equivale a votar "un tratado de paz definitiva, un compromiso para no volver a matarnos nunca más, que no haya muros como el de Berlín o dictaduras como la de Franco".
Otro de los recursos de Rubalcaba, recogido por la agencia Europa Press, fue: "Si fuera Pepe Bono, llegado a este punto trataría de resumir con una frase: diría que para los jóvenes esta Constitución es el bautizo y para los no tan jóvenes es la confirmación". Recibió una de las ovaciones más prolongadas de su discurso.
Aunque "Blanco nos dice que no nos metamos con el PP..."
Rubalcaba no perdió la oportunidad de arremeter contra el PP pese a que coinciden en la postura sobre el Tratado europaeo y pese a que destacó como bondad del mismo que une a fuerzas políticas de distinto signo. Se dirigió en concreto al presidente del PP, Mariano Rajoy y a sus palabras referidas a que la Constitución que se va a votar "no es la repanocha". "Pues es verdad –apostilló Rubalcaba–, si fuera la repanocha para el PP, yo no la podría votar, y al revés. No es la repanocha ni de Zapatero ni de Rajoy". Todo claro.
A pesar de que, según Rubalcaba, el secretario de organización del PSOE, José Blanco, "nos dice que no nos metamos con el PP", el portavoz parlamentario se excusó: "es que... es difícil". Así, arremetió contra la "profundidad de pensamiento" de Rajoy, "cuando dijo que Europa es más importante que Zapatero. Pues sí ¿no? Y que Rajoy. Y que Zapatero y Rajoy", ironizó.
Después le tocó el turno a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, a quien acusó de decir que, citó Rubalcaba, "si en el referéndum gana el no, no pasa nada". "Para venir de alguien que viene de mi generación, aunque ella diga que no –bromeó– y que votó la Constitución española, es muy arriesgado decir eso, porque ¿dónde estaríamos los españoles si no hubiese ganado el sí?". De hecho, recordó que hoy "nadie recuerda haberse abstenido en el 78, porque estamos orgullosos de la Constitución" y por eso "dentro de unos años recordaremos el día que Europa estrenó Constitución y podremos decir a nuestros hijos 'yo estaba allí'".
También pidió el voto afirmativo porque, en su opinión, es la mejor oportunidad de agradecer a Europa su solidaridad con España, que ha permitido nuestro desarrollo "con los impuestos de los ciudadanos europeos, que venían para echar una mano".