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Crespo, sobre la cacería de Garzón y Bermejo: "Algo ha pasado y saldrá"

El tercer levantamiento del secreto del sumario del caso Gürtel vuelve a estar protagonizado por conversaciones curiosas mantenidas por los cabecillas. Un ejemplo es la del número dos de la trama Pablo Crespo con su abogado en prisión.

Este viernes se han destapado las comunicaciones que los principales imputados y sus letrados mantuvieron una vez que éstos se encontraban internos en la prisión de Soto del Real (Madrid). Una de ellas, fue la mantenida por Pablo Crespo -el ex secretario de Organización del PP gallego y del jefe de la red, Francisco Correa- y su abogado en un primer momento, José Antonio López Rubal.

En dicha conversación ambos se referían a la famosa cacería que el exministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, y el entonces instructor del caso, el juez Baltasar Garzón, mantuvieron los días anteriores a que la causa saltase a la luz pública; cuando todavía no se habían producido las primeras detenciones.

Poco tiempo después, Bermejo fue obligado a dimitir y Garzón ampliamente criticado por la imagen parcial que había dado como titular del poder judicial al haber compartido escopeta y mantel siendo el instructor de un procedimiento que afectaba al PP con un miembro del Ejecutivo socialista. Estas críticas le costaron al magistrado una crisis de ansiedad y su hospitalización.

Sobre estos sucesos, Pablo Crespo le dice lo siguiente a su abogado: "En el Congreso –en referencia a Bermejo- dijo que no dimitía porque tenía que trabajar por España, no puede en un fin de semana derrumbarse, algo tiene que haber de fondo para que el lunes dimita sólo por eso, porque se haya ido a cazar, ni a un juez le puede dar un ataque de ansiedad simultáneo, algo tiene que haber de fondo, o les han grabado la cena, o han dicho algo durante la cena o puede resultar un proceso nulo cuando van a detener a alguien y que estén los tres juntos"... –haciendo omisión a la presencia del comisario de Policía, Juan Antonio González.

El letrado le responde que "a Bermejo le están presionando mucho, se está rescatando la idea de la escopeta nacional"...

Entonces, Crespo le contesta que "por eso no dimite un ministro, es imposible, estaba derrumbado y a un señor no le da un ataque de ansiedad y le meten tres días, algo ha pasado y saldrá, hay algo que ha acabado con la carrera de uno y pone en peligro la del otro".

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