El Partido Popular no ve absolutamente nada nuevo en el comunicado de la banda terrorista ETA. Tanto es así que se ha ceñido en un texto hecho público por Mariano Rajoy en marzo de 2006 para dar a conocer su opinión sobre el "alto al fuego" de los terroristas.
Primero de puertas para adentro y después en rueda de prensa, los populares han dejado claro que el único anuncio que esperan de ETA es su disolución así como el fin de sus actividades criminales. Todo lo demás son "cantos de sirena" y el líder de los populares espera que el Gobierno "no caiga en la trampa".
De hecho, a renglón seguido de constatar que los pistoleros siguen en las mismas, mandan el siguiente mensaje al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero: no aceptarán una nueva negociación política. "No lo vamos a permitir, eso es inadmisible", zanjó María Dolores de Cospedal, que utilizó un tono muy firme en sus advertencias al equipo gubernamental.
La secretaria general del partido afirmó, en este sentido, que van a seguir con una postura "exigente y constructiva", y en el capítulo de las exigencias está el que ninguna formación del entorno de ETA pueda colarse en las elecciones de mayo. "No se puede pagar ningún precio político por el fin de las armas", arguyó la número dos del PP.
Rubalcaba telefoneó a Trillo
Cospedal también confirmó que el ministro Rubalcaba se puso en contacto con el responsable en la materia del partido, Federico Trillo, para darle cuenta del nuevo comunicado y emplazarle a la rueda de prensa que iba a protagonizar en Interior para conocer la respuesta del Gobierno.
Por su parte, el presidente de los populares vascos, Antonio Basagoiti, desveló que se había puesto en contacto con el lehendakari, Patxi López, calificando esta interlocución de la "normal" en estos casos.
Precisamente, Basagoiti y Rajoy se reunieron al término del Comité Ejecutivo Nacional, celebrado este lunes en Génova 13, para valorar los hechos e insistir en la importancia de mantenerse firmes ante los últimos movimientos de la banda. Ambos también tomaron la palabra, en términos similares, ante la plana mayor del partido.
Ya en declaraciones a los periodistas, Basagoiti subrayó que lo que tiene que tener claro la sociedad es que se puede acabar con ETA, pero "no por lo que digan sus paranoicos comunicados, sino porque el estado de Derecho sea firme y siga haciendo lo que debe".
A su juicio, el comunicado dice lo de siempre: "que nos perdonan la vida a cambio de la autodeterminación, que quieren una negociación, que aquí hay un conflicto entre Estados, y toda su paranoia permanente".
Mayor Oreja: "Demuestra que había algo pactado"
Jaime Mayor Oreja también ha querido valorar el comunicado etarra en esRadio, donde ha aportado su fundada opinión: el comunicado es "la confirmación de que el proyecto en su conjunto estaba pactado, aunque el comunicado no estuviera pactado". Así, ha explicado que "el hecho de que provoque insatisfacción en el gobierno no significa que no se un proyecto común" argumentó. "ETA es como es, y no cambia, como organización terrorista no ha cambiado ningún objetivo".
"El gobierno no puede estar satisfecho, porque el gobierno no quería este comunicado" explicó. Además, señaló la incoherencia de que "el comunicado del PSOE sea bien distinto del ministro del Interior" lo que Mayor Oreja se explica porque "todo indica que algo había pactado, algo hablado existía, desde la declaración Bruselas".
El eurodiputado, cuya visión en torno ha ETA ya ha sido providencial en otras ocasiones se reafirmó en su postura: todo se trata de una maniobra para que "Batasuna esté en los ayuntamientos" porque "si no lo estuviera todo se vendría abajo, y a eso le tiene pánico Zapatero".
Además, advirtió: "Esto no termina hoy, acabará en una toma de posesión de la izquierda abertzale". Mayor Oreja confirmó que la marcha convocada por Alcaraz para el próximo 5 de febrero contará con su incondicional apoyo: "La apoyaré, porque estoy absolutamente identificado con lo dicho por el señor Alcaraz" proclamó.