A Duran no le gustaron nada los aplausos que recibió por parte del Grupo Socialista. "No me aplaudan, no estoy de acuerdo con ustedes", dijo. No obstante anunció que CiU no votará en contra del Plan de Ajuste por "responsabilidad".
Con la abstención de CiU el Gobierno tiene prácticamente asegurada la convalidación del decreto en la votación de la Cámara Baja, ya que sólo una confusión de alguno de los diputados socialistas podría provocar que el decreto fuera finalmente rechazado y derogado.
"El problema es usted y su gobierno", le espetó a Zapatero. "Se acabó su etapa como presidente del Gobierno, su etapa está finiquitada", dijo y le pidió que convoque elecciones, "pero no ahora, convoque elecciones cuando no consiga aprobar los presupuestos". Es decir, a final de año.
"Nosotros no pensamos en las próximas elecciones", incidió Duran, quien señaló que su votación puede "no ser entendida" por sus propios votantes. Dijo que si no se aprueba el decreto, las fianzas públicas españolas entrarían en riesgo de intervención como Grecia, lo que complicaría aún más los problemas de funcionarios y pensionistas. En este punto fue alabado por la bancada socialista, si bien Duran se mostró inflexible.
Añadió que Zapatero "ha concluido su etapa de Gobierno", aunque antes de abandonar el poder debe aplicar de una vez reformas laborales y del sistema financiero.
"No convoque elecciones ahora, en el peor momento de crisis", señaló Duran, e instó al Gobierno a convocar elecciones cuando se celebre el debate de los Presupuestos de 2011, que no contarán con el apoyo de CiU. "El problema es usted", le espetó al jefe del Ejecutivo.
Votos en contra, a favor y abstenciones
De momento y si no hay cambios en las posturas que los Grupos Parlamentarios han anunciado públicamente, el decreto contaría con 169 votos a favor (los de los diputados socialistas) y con 168 en contra, correspondientes al PP (153), PNV (seis), ERC (tres), IU-ICV (dos), BNG (dos), UPyD (uno) y Na-Bai (uno).
En el bloque de las abstencias se encuentran Coalición Canaria, que tiene dos diputados, y Unión del Pueblo Navarro (UPN), que tiene uno y CiU.
Con los 'números tan justos' entran en juego las sorpresas y los sustos. Si el PSOE quiere sacar adelante la norma, deberá contar con todos sus diputados en el hemiciclo y rezar para que no haya errores en el transcurso de la votación.