(Libertad Digital) El portavoz de CiU, Jordi Jané aclaró que su grupo no se opone a las nuevas comparecencias, pero que este cambio no puede obstaculizar las comparecencias ya acordadas. También señaló que estas nuevas comparecencias abren incertidumbres de futuro ante las de Aznar y Zapatero. “Hubiéramos preferido mantener el calendario acordado y, al final, abrir nuevas comparecencias. Hoy hemos abierto un nuevo sistema de que los calendarios no son fijos, se abren al vaivén de las nuevas informaciones que aparecen, lo que significa que otras nuevas informaciones provocarán nuevamente la necesidad de variar el calendario”.
El portavoz de ERC, Joan Puig, dijo que su grupo ha planteado que las comparecencias se mantuvieran hasta la de la portavoz de las víctimas y a partir de ahí hablar de otras nuevas porque la alteración del calendario acordada por PSOE, PP e IU “abre una fase que no sabemos cómo va a terminar”. Puig consideró que “esta tarde se ha confirmado el acuerdo PSOE-PP. Rubalcaba y Zaplana han pactado no hacerse daño”. Señaló que ya quedó patente con otras comparecencias que “la trama de Asturias es un desastre de coordinación” y que el nuevo calendario “es un error que va a distorsionar el planteamiento de la comisión”.
Emilio Olavaria, del PNV, dijo que a partir de ahora votarán en contra de “cualquier otra comparecencia que se solicite. Para nosotros, esta vez están cerradas las comparecencias” y consideró que la alteración del calendario se produce “a golpe de noticias sobrevenidas que no lo son tanto porque todos las conocíamos”. También criticó que se hayan aplazado las comparecencias de Aznar y Zapatero porque ahora habrá que casar otra vez agendas de "estos altos dignatarios" tienen sus ocupaciones.
José Antonio Labordeta, del CHA, dijo no entender el “interés enorme por preguntar a los guardias civiles que están en Asturias. Iba a venir Astarloa -ex secretario de Estado de Interior- que era el máximo responsable de estos guardias civiles”. Y para preguntar a estos guardias civiles, “hemos echado atrás el calendario de Aznar y Zapatero que nos había costado mucho”.
Por su parte, Gaspar Llamazares, portavoz de IU justificó su apoyo al cambio de calendario en que “nadie en su sano juicio” podría plantear reabrir la comisión una vez comparecieran las víctimas. “Nos parecían imprescindibles las nuevas comparecencias porque antes de comparecer los generales tienen que hacerlo los coroneles al objeto de coger todos los cabos sueltos”.